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Domingo González, director de Conaf en Ñuble, advierte: “nosotros no estamos autorizados para otorgar permisos para realizar quemas agrícolas o de rastrojos, ni para negarlos”.
Lo preciso sería decir que Conaf “está autorizado para realizar una autorización del uso de suelo, (por decreto supremo de 1980) y por lo tanto, los propietarios vienen a avisar que van a realizar sus quemas. Lo que podemos hacer es suspender el uso del fuego si es que las condiciones climáticas no permiten garantizar una quema segura”, aclara.
Hay, evidentemente, ciertas condiciones como un mínimo de participantes conforme a la cantidad de hectáreas a quemar; la necesidad de contar con herramientas especiales o incluso un camión aljibe si es necesario y la necesidad de quemar en forma parcializada si el predio es muy extenso.
Pese a estas medidas simples -que a la luz de las estadísticas no parecen suficientes para evitar desastres- la cantidad de personas que realizan quemas sin dar aviso a las autoridades y que se practican sin los resguardos mínimos son insospechadas para la Conaf.
Por esta razón, la Corporación acudió a la tecnología para mejorar su calidad fiscalizadora y “esperamos que esta semana comience el proceso de monitoreo satelital de las quemas, para poder aumentar las fiscalizaciones de esta acividad”, adelantó el director regional.
Esta implementación incluso podrá detectar aquellas quemas que se realizan de noche para evitar, incluso, alguna eventual fiscalización de Carabineros y evitar detenciones y multas. Ambas sanciones son las que proceden en casos de personas que utilicen el fuego como método de limpieza, sin haber dado cuenta a las entidades fiscalizadoras.
“Nosotros estamos facultados para plantear restricciones de horarios, permitimos actividades en las horas en las que contamos con los recursos de protección para poder combatir algún incendio que se pueda generar de alguna quema escapada”, precisa González.
Sin embargo, es en la noche el momento más seguro para realizar quemas debido a la humedad ambiental y a que las temperaturas son más bajas.
“Por esa razón, los horarios en que se pueden hacer las quemas son entre las 22.00 horas hasta las 14.00 horas del día siguiente”, detalla.
Aumentan las abstenciones
De todas formas, para las autoridades resulta evidente (aunque no cuantificable) que muchos propietarios de predios se han comenzado a abstener de ir a realizar las notificaciones de quemas, lo que asoma paradójico si se tiene en cuenta que las campañas comunicacionales implementadas por el Gobierno se han difundido como nunca antes.
Incluso, hace tres años se realizó la última modificación a la Ley de Bosques, que endureció las penas para quienes por descuido, negligencia, impericia o por voluntad provoque incendios forestales.
Dentro de las fiscalizaciones de la Conaf se contempla la ponderación del material a quemar, de las dimensiones del predio, de los métodos de contención con que cuentan los dueños de estos predios e incluso se revisa el historial del recurrente.
Increíblemente, se puede estar frente a una persona que cuente con historial de incendios y eso no es impedimento para que siga realizando quemas. Solo se le considera como un usuario priorizado para ser objeto de fiscalizaciones.
“Y solo cuando se certifica que cuenta con todos los elementos necesarios para hacer una quema, se le entrega el aviso”, dice el director de Ñuble.
Van 19 detenidos
En Ñuble existen seis personas formalizadas, en cuatro incendios forestales, todas por un actuar negligente o imprudente en el origen del fuego, delito contemplado en la Ley de Bosques.
Los casos investigados son en el Cerro Cayumanqui, en Quillón, otro es correspondiente a tres contratistas de una empresa de telefonía que también realizaban labores de limpieza en una faja de seguridad en el Cerro Capitán, en Portezuelo.
Y últimamente se agregaron dos casos más, uno en Pinto, y el último, registrado en Coihueco con la resultante de cinco viviendas destruidas. Se formalizó a una mujer por incendio causado por actuar negligente.
La seremi de Justicia, Jacqueline Guíñez, advirtió que “las sanciones por el delito de incendio son muy altas, pero hay un gran desconocimiento de la ciudadanía respecto a este punto. Hacemos un mea culpa como seremía, debemos participar más de estas campañas preventivas porque lo nuestro no es solo la cárcel o el Sename”, dijo.