Señor Director:
Transcurridos los primeros 180 días de este año, las apuestas relacionadas con la condición económica han cambiado, no obstante, no son percibidas favorablemente por la sociedad. Así, las medidas de la autoridad económica deben ser muy acertadas y, sobre todo, explícitas en relación con el control de la inflación, el crecimiento y las mejoras en empleo.
En la ciudadanía aún persiste la incertidumbre, relacionada con la gestión política y de seguridad que nos rodea. Además, debemos sumar el aumento sostenido de los precios de los productos de primera necesidad, el alza de la inseguridad pública y, por cierto, la desconexión del sistema político con las demandas de la ciudadanía.
Hasta ahora las medidas son recibidas por la ciudadanía como insuficientes, debido al aumento del desempleo, las restricciones de acceso a fuentes formales de financiamiento y la escasez de recursos.
Iniciando el segundo semestre con un IPC negativo en el último mes y un desempleo del 8,7% en el trimestre móvil anterior, es fundamental tomar medidas acertadas para enfrentar los meses venideros, más aún, entendiendo que en los temas macroeconómicos también tenemos indicadores complejos, como el tipo de cambio, precios de los combustible, materias primas y balanza comercial, la cual ha presentado un descenso de un 6% respecto del periodo anterior. En conclusión, es necesario colocar los acentos donde corresponde y no quedarnos en discursos populistas.
Marcelo Gutiérrez Delgado
Académico Advance USS