Un total de 42 pequeños agricultores de la comuna de Chillán, usuarios del Prodesal Indap, participaron ayer en un encuentro-taller en el Teatro Municipal de Chillán, en el marco de la iniciativa “Invernaderos para Chillán”, liderada por la Dirección de Desarrollo Productivo (Didepro) de la Municipalidad, que apunta a incentivar la implementación de tecnologías en la pequeña agricultura, particularmente los cultivos bajo plástico.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]La jornada contó con la participación de la alcaldesa protocolar, Brígida Hormazábal; de la directora regional de Indap, Tatiana Merino; del presidente, vicepresidente y gerente técnico de la Asociación de Agricultores de Ñuble, Carlos González, Carlos Smith y Manuel Faúndez, respectivamente; así como también de profesionales de la Universidad de Concepción, de los Prodesal y de la empresa Arava, comercializadora de tecnologías de cultivo bajo plástico, entre ellas, la israelita.
Renato Segura, director de la Didepro, sostuvo que “hoy, la ruralidad de Chillán no está en condiciones de abastecer de alimentos a la ciudad, lo que significa que frente a cualquier eventualidad no tenemos la posibilidad de tener productos frescos para satisfacer nuestra demanda”, de hecho, destacó que muchos de los alimentos que se consumen en la zona provienen del Norte e incluso, del extranjero.
El desafío, subrayó, “es levantar la capacidad de los productores locales para abastecer de alimentos a la comuna, es decir, que efectivamente tengamos capacidad instalada para que los productos frescos puedan comercializarse en la comuna”.
El director de la Didepro explicó que “queremos mostrarles tecnología a los pequeños agricultores, que les permitan en el futuro sostener su actividad, que es la producción agrícola, respecto a la cual existen muchas deudas, en materia de política local, de desarrollo, de precios, de tecnología. Queremos hacernos cargo de nuestra ruralidad”.
“Queremos generar nodos tecnológicos agrícolas, sobre todo, en el área hortofrutícola, que es el sector que nos va a permitir abastecernos de alimentos en el futuro. Tenemos que ser capaces de producir nuestros alimentos, y para eso necesitamos tecnología, invernaderos, que los agricultores cambien sus procesos productivos”, puntualizó Segura.
Potencial productivo
Carlos Smith, por su parte, apuntó a la producción de alimentos y la seguridad alimentaria, por un lado, y a la generación de empleos y de empresas, por otro. “Estamos en un punto estratégico para la producción de hortalizas para abastecer mercados como Biobío y Ñuble, por lo tanto, se puede orientar a algunos productores que tengan la motivación para generar hortalizas con tecnología de punta, este proyecto permite poner en contacto a quienes proveen la tecnología, a quienes tienen el financiamiento y a estos agricultores, pequeños o medianos. Está la posibilidad real de hacer una transformación, de una agricultura muy asistida, que es la que hacen los Prodesal, muy pensada en el consumo familiar, para que esto sea una cosa comercial”.
El dirigente valoró, además, que las tecnologías de cultivo bajo plástico cuentan con sistemas de riego eficiente.
De igual forma, la directora regional de Indap sostuvo que “esta iniciativa es muy provechosa para los pequeños agricultores, porque se trata de relacionar diferentes instituciones para sacar adelante la pequeña agricultura de la región. Esto nos hace trabajar en conjunto, potenciando todas las actividades, para andar más rápido, para articularnos, para focalizar nuestros recursos. Estamos trabajando hace tres años fomentando los cultivos en invernadero, tanto con usuarios de Prodesal como también con varios SAT de hortalizas, y el año pasado, con recursos del Gobierno Regional, financiamos 25 invernaderos de tipo israelita en un SAT de hortaliceros de San Carlos”.
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