Señor Director:
Me parece realmente decepcionante el desempeño del precandidato Carlos Maldonado del partido Radical en el primer debate presidencial televisado, de cara a la consulta ciudadana del próximo 21 de agosto. En primer lugar, no tuvo la fuerza para condenar expresamente la violencia política, de igual manera su tono francamente beligerante y misógino sus competidoras, y lo que es peor, hablar de ser el heredero natural del Presidente Pedro Aguirre Cerda y no saber nombrar alguno de sus hitos más destacados en materia de educación pública en nuestro país; cómo lo fue la ley de instrucción primaria obligatoria.
En mi opinión, no sirve de nada que insista en que él estuvo disponible mucho antes que sus contendoras políticas, cuando su discurso de fondo es realmente tan precario, ambiguo y con falta de una visión holística del proceso que está viviendo nuestro país.
Augusto Guillermo Aranís