El presidente argentino, Alberto Fernández, defendió a la vicepresidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner (CFK), tras ser procesada por el fiscal Diego Luciani.
El mandatario dijo que “Cristina Fernández de Kirchner no cometió ninguno de los delitos que se le atribuyen”.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Pero además, el actual mandatario recordó el caso del ex fiscal Alberto Nisman, quien se suicidó en 2015, justo antes de hacer una presentación sobre el apoyo del kirchnerismo para encubrir a los responsables del atentado terrorista a un centro judío en 1994 en Buenos Aires que causó 84 muertes.
“Nisman se suicidó, espero que Luciani no haga algo así”, sostuvo el gobernante argentino.
“Al fiscal Luciani le regalaría algunos tratados de derecho penal. Lo escuché y me pareció de una debilidad jurídica asombrosa lo que dijo. Por mucho que grite Justicia o corrupción, dijo un sinfín de disparates jurídicos”, añadió.
Por asociación ilícita y administración fraudulenta de fondos públicos, está acusada la vicepresidenta ante supuestas irregularidades en la concesión de 51 obras públicas a firmas pertenecientes al empresario Lázaro Báez durante su mandato y el de su marido, el fallecido Néstor Kirchner (2003-2007), en la provincia de Santa Cruz (Patagonia), cuna política del kirchnerismo, informó Bio Bio Chile.
El lunes pasado, en su alegato final, el fiscal que interviene en la causa, Diego Luciani, además del pedido de 12 años de prisión, solicitó que CFK sea inhabilitada de manera perpetua para desempeñar cargos públicos.
Por su parte, el jefe de Estado consideró que hay “carencia de pruebas” y tildó el juicio de “disparate jurídico”.
“Más allá de la carencia de pruebas que el fiscal demostró, partía de una premisa insólita que decía que ella como presidenta no pudo no saber lo que pasaba”, indicó Alberto Fernández.
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