Aparentemente los planes del Ministerio de Vivienda y Urbanismo (Minvu) y de la Intendencia y el Gobierno Regional, de validar durante lo que resta de este 2020 el Plan Intercomunal Chillán-Chillán Viejo, se verán trastocados por nuevos antecedentes que aportaron ayer dos entidades locales que no había realizado observaciones en la etapa formal del proyecto.
El Consejo Regional (CORE), sesionó ayer en Comisión de Planificación y Desarrollo Territorial con el objetivo de ver las indicaciones de la Coordinadora Ambiental Ñuble Sustentable y de empresarios asentados desde decenios en la variante Nahueltoro, en la inmediaciones del casino y hacia el camino a Cato.
La relevancia y el peso de los argumentos presentados fue de tal magnitud que los consejeros decidieron una vez terminada la sesión, fijar una nueva audiencia probablemente durante la próxima semana, de tal manera que en el intertanto se comprometieron a estudiar los antecedentes presentados.
El consejero Arnoldo Jiménez confirmó: “vamos a estudiar los antecedentes y durante los próximos días fijaremos una reunión para ver los pasos a seguir”.
Aparentemente, no se descarta que el Prich, que según el Minvu tendría que ser confirmado por el Consejo Regional durante la primera quincena de diciembre, tenga un periplo más largo y se proyecte hacia enero próximo.
El asesor ambiental de Chillán Viejo, Antonio Arriagada, indicó que no sería un problema mayor que la carta de navegación de la conurbación sea postergada en su aprobación hasta el mes de enero, mientras se le realizan las enmiendas que sugieren los vecinos del territorio.
Rechazo
Uno de los que dialogó de manera telemática este martes con los consejeros regionales fue el empresario Carlos Valencia, gerente de la empresa Frigosur, que atiende clientes ubicados en varias regiones de la centro sur del país y que en los últimos años ha tenido un importante crecimiento.
Valencia planteó que el Prich que está en proceso de validación “debe ser rechazado pues afecta el crecimiento y subsistencia de unas 40 empresas de diverso orden que existen en torno a la variante Nahueltoro, desde el peaje norte al camino a Cato”.
Se trata de una zona que sería considerada en el Prich como de interés inmobiliario y donde probablemente se pongan severas restricciones a todas las empresas que existen en el sector, como frigoríficos, barracas, bodegas, metalmecánica, entre otras.
El empresario agregó que si fuera aprobado este Prich, “en el futuro nos pondrían dificultades para crecer de tal manera que muchas empresas que generan importantes fuentes laborales tendrían que irse”.
Según antecedentes entregados a los cores, “en el área rural normada no se considera el uso industrial del sector, contrastando fuertemente con la realidad, ya que en la zona existe la presencia de unidades productivas de larga data”, en algunos casos de 30 años.
Es por eso que piden en el documento ingresado de manera formal al CORE, que “en el caso de sector donde desarrollamos nuestras actividades industriales, que dichas normas faciliten el desarrollo empresarial y no ponga restricciones a su crecimiento y consolidación. Creemos muy necesario que el desarrollo empresarial que se ha venido dando en el sector debe conservarse y normalizarse a fin de lograr un crecimiento económico equilibrado y sustentable para la intercomuna”.
De esta manera, plantean que “se deben cambiar las áreas que se están proponiendo para el sector o ampliar el uso permitidos de suelos e incorporar actividades industriales no peligrosas, bodegas, y grandes depósitos, al menos en una franja de 350 metros a cada lado de la variante Nahueltoro”.
Sin embargo, plantean los empresarios instalados en la zona, “lo ideal sería que la zona en comento fuera declarada como área industrial”.
Ñuble Sustentable
Adicionalmente, durante la sesión expuso Ulises Lari, dirigente de la Coordinadora Ambiental Ñuble Sustentable, con el objetivo de sensibilizar a los cores respecto de una serie de situaciones que no estarían incluidas en el Prich y que deben ser parte de este instrumento de planificación.
Lari indicó que uno de los temas que no están incluidos corresponde a la normativa que regula los humedales urbanos, que fue aprobada a comienzos de año y cuyo reglamento está vigente desde el 24 de noviembre pasado.
Según la entidad, “se necesita una región y comunas sustentables, en donde se respetara realmente el derecho constitucional a vivir en un ambiente libre de contaminación”.
Este organismo planteó que “el cuidado y protección de la naturaleza, de nuestros recursos naturales, y en general de nuestra biodiversidad, eran los elementos centrales. Deseábamos ser una región y comunas pioneras en la elaboración de instrumentos de planificación con un sello ecológico, especialmente si estamos enfrentados a un acelerado proceso de cambio climático y con marcado énfasis en el déficit hídrico”.
En el caso de la Estrategia Regional de Desarrollo, plantearon, los objetivos que perseguían no se cumplieron, “porque si bien el documento final destacó la gran vocación de la gente de esta región por impulsar un desarrollo sustentable y por su interés en el medio ambiente, esto no se vio reflejado ni en las estrategias ni en las acciones que propuso el documento final aprobado”.
Y respecto al Prich, plantearon que este Plan Regulador Intercomunal Chillán-Chillán Viejo, recogió algunos aportes de esta coordinadora y de otras organizaciones ambientales en el sentido de establecer la prohibición “en todas las zonas del presente plan, el emplazamiento de actividades productivas de impacto intercomunal calificadas como peligrosas, insalubres o contaminantes”.
Sin embargo, advierten, “el Prich no explicita la prohibición de evitar a toda costa en la intercomuna el surgimiento de zonas de sacrificio, en torno a las áreas industriales, planteles porcinos o equipamientos sanitarios, por mencionar algunos riesgos”.
Por otra parte, zonifica el área sur de la intercomuna, en torno a la Rta 5, como el emplazamiento ideal para el desarrollo industrial, pero indican, “olvidan los planificadores que en la temporada primavera, verano y otoño, predomina el viento sur y todos los malos olores y contaminación atmosférica que pueden generar los parques industriales llegarán a las áreas urbanas de Chillán y Chillán Viejo, que está declarada desde el año 2013 como Zona Saturada y Zona Latente, y está vigente el Plan de Prevención y Descontaminación Ambiental, PPDA”
Estas dos comunas, además, “son deficitarias también en materias de planificación urbanística y territorial. El crecimientode las ciudades no obedece a una planificación, sino que en gran medida a necesidades industriales, habitacionales y también a la especulación inmobiliaria. Son innumerables los poblados rurales que han surgido al costado de los caminos”.
De esta manera el grupo ambiental expone esta y otras materias que debieran quedar establecidas en el futuro Prich y que no aparecen en algunos casos cabalmente expresadas en el informe de la empresa Urbe Diseño y Construcción y que validó el Minvu, entidad que espera la validación el Consejo Regional.