Señor Director:
En buena hora comienza a funcionar la Nueva ley de Portabilidad Financiera. Según la Superintendencia de Banco e Instituciones financieras (SBIF), el 97% de la población adulta en Chile tiene algún producto financiero.
Con la nueva ley se permitirá que las personas puedan cambiarse -de manera más fácil, con menos trámites y a un menor costo- de una institución financiera a otra que le ofrezca mejores condiciones.
Y si bien, las personas no dejarán de endeudarse, con esta ley al menos les permitirá cotizar, reducir sus gastos y en una visión optimista permitirá saldar las deudas con mayor rapidez, otorgando ofertas más convenientes, pero sobre todo entregando más competencia a un mercado que se caracteriza por no entregar opciones flexibles y a la medida del bolsillo de los chilenos.
Francisca Matamala Tocornal