Nuevamente la oposición no logró ponerse de acuerdo, y fracasó en su intentó por juzgar políticamente al exministro de Salud, Jaime Mañalich, por su gestión durante la pandemia.
La Cámara de Diputados rechazó por 71 votos a favor, 73 en contra y siete abstenciones la admisibilidad de la acusación constitucional presentada en contra del exsecretario de Estado, y entre los votos “díscolos” del sector, estuvieron los tres legisladores de centro izquierda de Ñuble: Jorge Sabag (DC), quien rechazó; Loreto Carvajal (PPD), quien se abstuvo, y Carlos Abel Jarpa (ind.), quien no votó.
La postura que causó más extrañeza fue la de Carvajal, quien ha sido particularmente crítica del manejo de la pandemia por parte del gobierno, y quien en junio pasado, tras la salida de Mañalich de la cartera, manifestó que “las autoridades no solo por el hecho de salir terminan su responsabilidad, por cuanto no descarto una acusación constitucional luego de tener todos los antecedentes”.
Si bien la legisladora no quiso hablar con LA DISCUSIÓN, declaró al diario La Segunda que “en esta situación compleja, es difícil crear una convicción plena, y ante la duda, yo sostengo que uno siempre puede comprender decisiones”…( ) “Cuando una diputada no se genera la suficiente convicción, es totalmente legítimo abstenerse cuando no hay seguridad ni certeza”.
Las suspicacias en torno a su votación se acrecentaron, además, porque tanto Carvajal, como su par de la DC, Gabriel Silber -quien también se abstuvo-, mantienen abierto un sumario sanitario por parte de la Seremi de Salud Ñuble, por evadir un control e intentar cruzar una barrera sanitaria durante fiestas patrias, respectivamente. Dicha investigación podría concluir en severas multas para ambos parlamentarios.
Además, Carvajal integrará la comisión revisora de la acusación constitucional en contra del ministro del Interior y exsenador por Ñuble, Víctor Pérez (UDI), donde su voto será crucial.
“Gustito” político
Según el diputado DC, Jorge Sabag, “como partido lo expresamos desde un principio, que no era oportuno en medio de la pandemia, instalar esta acusación constitucional, por eso nadie suscribió el libelo. En lo personal, no me parece correcto querer dejar a Mañalich como el culpable de todas las muertes, solo por darse un ‘gustito’ político. ¿Alguien puede creer que un ministro de Estado va querer que ocurran todas estas desgracias? Nadie en su sano juicio, pueden existir dudas en la posible manipulación de cifras, pero eso lo está investigando la justicia, que es la encargada de ver eso, no nosotros los parlamentarios”, aseveró.
Sabag recordó que “así como me pareció irresponsable esa oposición que un día quiso acusar a la Presidenta Bachelet de las muertes para el terremoto del 27-F, hoy hago lo mismo en el caso de el ex ministro de Estado, no es el rol de la oposición que un día aspira a ser gobierno actuar de esta forma. Sería mucho más fácil para mí votar al unísono, pero no estamos en el congreso para ser comparsa del Frente Amplio, yo estoy para votar en conciencia, y hoy a la gente le interesa más el segundo retiro del 10%, mayor empleo, o mayor seguridad, y no este tipo de acusaciones al voleo”, manifestó.
Carlos Abel Jarpa, en tanto, sostuvo que “el ministro se vio forzado a dejar su cargo hace cuatro meses, en gran parte por las críticas de muchos actores técnicos y políticos de la cual yo fui partícipe, manifestando en distintas oportunidades mi desacuerdo con la gestión del ministro y su forma de enfrentar y escuchar las críticas de la mesa social”.
Según el legislador, “esta acusación, que en mi opinión, tenía méritos para revisarla y discutirla, no tenía los antecedentes suficientes y contundentes para aprobarla. Además, el tema de la manipulación de las cifras que está judicializado, de ser cierto y comprobado, tendrá una sanción que trasciende a una inhabilitación. Como la defensa del ex ministro optó por no discutir la cuestión previa de la acusación constitucional de la cual yo adhería, opté por no participar de la votación final de ésta, en señal de mi desaprobación de la gestión de Mañalich, pero que, aun así, a mi juicio, no es motivo suficiente para aprobarla”, planteó.