La pobreza en Argentina ascendió en enero pasado al 57,4 % de la población, de acuerdo con el último informe del Observatorio de la Deuda Social de la Universidad Católica Argentina (ODSA-UCA).
Se trata del porcentaje más alto desde que se inició la serie en 2004, cuando el país alcanzó un 54 % de pobres.
Según el documento, dado a conocer por la agencia EFE, “Estimación de los efectos del Impacto Inflacionario posdevaluación. Escenario a diciembre 2023 y enero 2024”, la población indigente en Argentina ascendió del 14,2% en diciembre al 15% en enero, y la tasa de pobreza pasó de 49,5% al 57,4% durante el mismo período.
Las proyecciones indicarían que habría casi 27 millones de personas pobres, de los cuales 7 millones serían indigentes.
Los motivos que generan mayor vulnerabilidad económica en el país están relacionados con un contexto de alta inflación, que actualmente alcanza los 254,2% interanual y 20,6% a nivel mensual, y los costos de la canasta básica alimentaria que acarrean un crecimiento interanual del 258,2 %.
“Para ponderar el agravamiento de la situación social se realizaron dos ejercicios de simulación: El primero recalcula el nivel de indigencia y pobreza en la situación de incremento de canastas y actualización de ingresos laborales y no laborales de diciembre de 2023, explica el informe.
El presidente de Argentina, Javier Milei, se hizo eco de los números brindados por la UCA y achacó el problema de fondo a “la casta” política del país.
“La verdadera herencia del modelo de la casta: 6 de cada 10 argentinos son pobres. La destrucción de los últimos cien años no tiene parangón en la historia de Occidente.