Share This Article
En permanente estado de revisión se encuentra en la actualidad el Plan de Desarrollo Comunal, Pladeco, el que fuera ejecutado por la Universidad del Bío-Bío y aprobado a fines del año pasado tras un largo proceso de participación ciudadana.
El instrumento de navegación comunal que establece los planes municipales para el período 2019-2024, contiene una matriz de iniciativas de inversión y programas que fueron priorizados por la entidad edilicia y la comunidad.
Lo que se busca, se indica desde el municipio como también desde el Concejo Municipal, es que haya un seguimiento permanente respecto del estado de aquel conjunto de ideas con el objetivo que se llegue al 2024 con ellas ejecutadas en un alto porcentaje.
La tarea no parece ser muy compleja si se considera que el documento maestro tiene un total de 162 propuestas de inversión y programas que ejecutará el municipio, en función de 12 lineamientos o ejes. En contraposición, el anterior Plan comunal 2011-2015 contaba con más de 380 ideas.
Para la carta de navegación municipal se privilegió un documento factible de ser cumplido por lo que carece de grandes y costosas propuestas para el desarrollo comunal y no son pocas las ideas que vienen desde el Pladeco anterior y por lo tanto, tenían avances concretos.
Desde el municipio chillanejo se planteó que el Plan de Desarrollo Comunal, que está en plena ejecución, se encuentra en una fase en que profesionales municipales se encargan de visualizar que se respeten los plazos.
Desde la Secretaría de Planificación se informó que las gestiones que se llevan a cabo en esta etapa “corresponden inicialmente a reuniones con delegados que son designados por los directores municipales por lineamiento, para revisar los estados de avance”.
En estas condiciones, se plantea que es factible realizar “un seguimiento de la matriz de iniciativas contenidas en este instrumento de planificación proyectado hasta el año 2024”.
En la actualidad, la Municipalidad ya no tiene relación alguna con la Universidad del Bío-Bío Campus Chillán, pues la asesoría de esta entidad terminó una vez que fue aprobado este instrumento por parte del Concejo Municipal en diciembre del año pasado. Por ello la responsabilidad única de analizar la marcha del Pladeco es de la Secretaría Comunal de Planificación (Secpla).
Desde el Concejo Municipal, el concejal Camilo Benavente planteó que durante las próximas semanas esperan convocar a una reunión de la comisión Obras con el fin de verificar que el Pladeco esté en ejecución y los proyectos efectivamente hayan sido priorizados y se garantice su ejecución.
El edil PPD agregó que “hemos visto que lamentablemente, la Municipalidad de Chillán ha presentado muy pocos proyectos de inversión en el último tiempo en el Mercado Público, lo que parece indicar problemas en la gestión interna”.
Agregó que la entidad edilicia ha tomado decisiones relevantes, como es la fusión de establecimientos educacionales, lo que constituye una política que debe ser parte de un plan estratégico, pero del que no han sido informados como Concejo.
El concejal Juan López Cruz agregó que “no tengo muchas esperanzas en este Pladeco que fue generado con muchos problemas y aprobado luego de cambios de equipo en la entidad asesora y además, luego de que asumiera un nuevo jefe de Planificación que al poco tiempo terminó renunciando”.
En la etapa de concreción del Plan, agregan los ediles, quedó de manifiesto la existencia de múltiples conflictos urbanos que requieren solución urgente, como la segregación urbana que genera la línea férrea, lo que deriva que el sector poniente de la comuna tenga una mala conectividad hacia el sector céntrico.
Se suma un transporte público desordenado y sin licitar, que no abarca todos los sectores de la comuna, carencia de una red de ciclovías en varios sectores de la comuna, falta de semaforización en varias intersecciones y fallas de sincronización en algunas intersecciones semaforizadas.
En las cuatro avenidas, en tanto, uno de los principales problemas detectados es la congestión que existe en la parte céntrica de la ciudad, la que genera grandes tacos, contaminación acústica y aumento en los tiempos de viajes, entre otros efectos.
Se suman a los problemas descritos, veredas en mal estado, calles con pavimento deficiente, excesivo cableado aéreo, entre otros fenómenos que no están resueltos.
Lo que se espera, plantean los ediles, es que la Municipalidad y entidades sectoriales actualicen el Plan Maestro de Transporte, trabajen para mejorar la conectividad del sector poniente o modernizar el transporte público, entre otros planes y programas.
En general, los proyectos más importantes que requieren seguimiento permanente se relacionan con la instalación de una UOCT regional, la creación de una unidad técnica de proyectos de infraestructura vial, habilitar estacionamientos subterráneos, mejorar la iluminación peatonal y crear parques y jardines.
El concejal Patricio Huepe subrayó que frente a los grandes requerimientos urbanos, “es necesario comenzar a visualizar el cumplimiento real del Pladeco, pues un defecto que tiene es que no propone fechas claras para la ejecución de las propuestas”.
De esta manera, remarcó, los proyectos están considerados para ser ejecutados en el vasto período de seis años que va desde el 2019, que ya termina, hasta el 2024.
En estas condiciones, parece fundamental que el gobierno comunal adopte medidas concretas para que esta carta de navegación sea efectivamente ejecutada de manera gradual y no se concentren las propuestas al final del período.
En el Pladeco, otro aspecto destacable es el seguimiento georrefenciado para su desarrollo. En particular, el sistema considera diversas capas de información, siendo una de ellas las 9 zonas en que se dividió el territorio comunal, como también las iniciativas de las 12 áreas estratégicas que constituyen la matriz y sus respectivas fichas.
