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Autoridades regionales, representantes de entidades públicas y de la sociedad civil, solicitan que la Reserva de la Biósfera Nevados de Chillán-Laguna del Laja, creada por la Unesco el año 2011 y que considera a seis comunas cordilleranas de Ñuble, sea administrada desde el nivel local y no desde Biobío como ocurre hasta ahora.
La administración del llamado Corredor Biológico, que abarca más de 572 mil hectáreas, quedó bajo control del Gobierno Regional del Biobío, sin que esa tutela fuera traspasada a Ñuble cuando se creó la región.
El seremi del Medio Ambiente, Patricio Caamaño, expresó que “una decisión como esa es coherente con el informe final del EULA de la Universidad de Concepción, que analizó la estrategia de desarrollo de ese vasto territorio”.
La autoridad explicó que a partir de los antecedentes mencionados en el documento de la entidad asesora, “la mayor parte de las inversiones propuestas se concentran en áreas que son de Ñuble”.
El seremi planteó que se debe analizar la figura que permita que esta región administre sus áreas protegidas, pero probablemente se pudiera dar una suerte de “sinergia con Biobío, que tiene dos comunas en el corredor biológico”.
Desde Pinto, la dirigenta ambiental Rossana Sandoval, quien inició el trabajo de desarrollo del Corredor, planteó estar de acuerdo “con que se instale en Ñuble la gestión de la reserva, porque es donde se concentra la mayoría de las comunas y tenemos que trabajar entre todos para que este sea un Parque Nacional”.
Agregó que la Reserva de la Biósfera “alberga la Reserva Ñuble, el Santuario de la Naturaleza y Reserva Huemules de Niblinto y recursos hídricos, flora y fauna endémicas y tiene, además, la última población de huemules de Chile Central”.
La profesional agregó que lamentablemente el territorio está amenazado por “proyectos inmobiliarios, hidroeléctricos insustentables, monocultivos, introducción de especies foráneas”, entre otros factores.
En el caso de la Subsecretaría de Desarrollo Regional (Subdere), los trabajos de planificación están en una etapa inicial y se espera que próximamente comiencen reuniones de coordinación con Biobío para delinear una alianza entre ambos territorios.
El geógrafo Pablo San Martín, profesional de la Subdere, dijo que “si Ñuble logra producir un desarrollo distinto en la cordillera, donde se reduzca gradualmente la pobreza y la precariedad, pero conservando lo que queda de nuestro rico patrimonio, entonces estaremos en el camino correcto”.
El intendente Martín Arrau expresó que “se ha constituido un grupo de coordinación entre varias instituciones públicas y municipios involucrados para revisar la propuesta del Plan de Gestión que está elaborando el Centro EULA de la Universidad de Concepción. Este proceso es relevante para desarrollar desde Ñuble un plan de desarrollo de la cordillera, que se caracteriza en lo social por tener población escasa, dispersa, con alta pobreza, desconectada y de edad mayor”.
Agregó que en la misma instancia se evaluará cómo ir asumiendo la gestión birregional en coordinación con el Gobierno Regional del Biobío y las instituciones que forman parte de la gobernanza de la Reserva de la Biósfera.