Pet Babies: Investigadores UdeC crean primer probiótico para mascotas
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Al igual como ocurre con las personas, la microbiota del tracto gastrointestinal en los animales de compañía juega un rol fundamental en su salud y bienestar.
Cuando los microorganismos que la componen se encuentran en equilibrio (eubiosis), la absorción de nutrientes, la digestión y el tránsito intestinal ocurren de forma óptima, impidiendo también el desarrollo de bacterias patógenas.
Al contrario, un estado de disbiosis puede dar paso a la aparición de problemas digestivos diversos incluyendo las diarreas y gastroenteritis, muy comunes en gatos y perros y que tradicionalmente se tratan con antibióticos.
Estas afecciones también pueden ser abordadas con probióticos intestinales, preparados que permiten introducir microorganismos vivos al sistema digestivo, ayudando a restablecer el equilibrio de la microbiota con especies beneficiosas.
El mercado es pródigo en este tipo de productos, que se ofrecen en forma de snack, suplementos, gomitas y gotas, entre otros, y al que la Universidad de Concepción, se suma con Pet Babies, el primer probiótico para animales hecho 100% en Chile.
Desarrollado por investigadores de Ciencias Veterinarias y Ciencias Biológicas de la casa de Estudios, el producto -una fórmula en polvo que se añade a la comida habitual de la mascota- fue licenciado a Liva Company, empresa pionera en tecnologías de producción y escalamiento de microorganismos en el país, que también produce probióticos para consumo humano y animal.
Este ha sido un gran paso para el equipo científico integrado por los doctores Sandra Quilodrán Vega (Ciencias Veterinarias), Jorge Toledo Alonso (Ciencias Biológicas) y Julio César Villena, del Centro Referencia para Lactobacilos (Cerela) de Argentina.
Formulación
Pet Babies está compuesto por cepas de Lactiplantibacillus plantarum y Lacticaseibacillus rhamnosus que, además de aumentar la protección inmunológica de las mascotas frente a patógenos en general, demostraron ser efectivas para combatir a los agentes responsables de diarreas en perros y gatos.
“Nuestro probiótico tiene efecto de inhibición sobre las bacterias que causan diarrea; por lo tanto, su administración ayuda a minimizar las infecciones por patógenos y la disbiosis, que es la desorganización en el epitelio intestinal”.
La especialista explica que para el desarrollo del probiótico se aislaron cepas desde calostro y leche materna de perros y gatos. “Los que existen actualmente no informan su procedencia o son de origen humano, pero para que se reconozcan mejor y actúen en nuestras mascotas, los probióticos deben contener microorganismos que se encuentren naturalmente en los animales”.
Así, indica la Dra. Quilodrán, este producto puede ser utilizado con fines preventivos, sobre todo en cachorros de perros y gatos que están viviendo el proceso de transición del destete a la alimentación sólida.
“En este período, los problemas intestinales suelen ser frecuentes, porque su sistema inmune se debilita al dejar de recibir la protección de la leche materna y porque deben comenzar a asimilar el alimento nuevo. Además no todas las mascotas son indoor y eso los expone a infecciones”, comenta la experta.
El probiótico también está indicado para madres que al amamantar podrían traspasar cepas sanas a sus bebés a través de leche. La académica comenta que hay investigaciones que señalan que las bacterias benéficas se transfieren desde el intestino de la madre a la glándula mamaria.
Pet Babies es resultado de varios años de investigaciones en torno a distintos microorganismos a las que han contribuido tesistas de pre y postgrado; estudios que alcanzaron avances significativos a partir del proyecto Fondef Formulación probiótica que reduce la administración de antibióticos en el tratamiento de infecciones gastrointestinales en mascotas, que dio pie a una patente concedida en septiembre de 2022.
Las cepas del probiótico fueron trabajadas y escaladas por los doctores Quilodrán y Toledo, mientras que el Dr. Villena realizó los análisis inmunológicos. Los estudios clínicos, en tanto, fueron coordinados por el académico de Ciencias Veterinarias, Dr. Ignacio Cabezas Ávila.