Pese a que aún no hay modificaciones sustantivas en términos legales a las penas que se aplican a quienes reducen especies por Internet, sí hay un estrategia que a nivel nacional viene aplicando la PDI para atacar este delito y otros asociados a la reducción de artículos robados.
Se trata del Plan IR-360 (en alusión a una mirada en 360 grados del delito como fenómeno), cuyo objetivo principal es esclarecer la dinámica de los robos a nivel nacional, a través de estrategias que incorporen, entre otras cosas, tecnología de punta, el análisis e inteligencia policial, y de esta forma contribuir a mejorar la percepción de inseguridad en las personas.
El jefe de la Brigada Investigadora de Robos (Biro), subprefecto Manuel Durán, explica que el IR-360 “pretende lograr el reentrenamiento para los funcionarios de las Biro en materia de análisis e inteligencia policial y en materias de uso de implementación tecnológica, también busca la renovación de tecnología de última generación para la investigación criminal e incorporar técnicas especiales, al igual que en tema de drogas, las interceptaciones telefónicas, el uso de agentes encubiertos, entrega vigilada, con el fin de identificar a estas bandas criminales”.
En terreno y oficinas
Una de las misiones de los detectives que estén a cargo del IR-360, será fiscalizar permanentemente a casas de compra y venta de metales, casas de compraventa de vehículos, joyerías, lo que supone un constante trabajo en terreno.
“Esto, con el fin de detectar y pesquisar a posibles reducidores de especies sustraídas y de este modo vincular delitos contra la propiedad y la venta de las especies, de este modo desincentivar la compra de especies”, aclara Durán.
Aunque no existen antecedentes concretos que den cuenta del delito de receptación en locales de compraventa en Ñuble, ésta es una línea investigativa que se busca abordar entendiendo que las especies que son robadas tienen que ser reducidas tanto en mercado formal como informal y a través de redes sociales.
Dentro de la implementación del IR-360, se encuentra la formación de las Oficinas de Análisis (Ofan), cuya importancia radica en el trabajo analítico y en el cruce de información tanto de las brigadas especializadas, grupos operativos y Medbro (Mercado de Bienes Robados), lo que repercute en mejores resultados investigativos.
En cada Biro, a nivel nacional, se designa un equipo con dedicación exclusiva a este tipo de investigaciones, el Equipo Medbro,que trabajará coordinadamente con el equipo de la Oficina de Análisis Criminal (Ofan) de cada prefectura.
Tecnología y chips
En cuanto a la tecnología que se espera llegue a la PDI de Ñuble, se considera un chip capaz de recuperar información total de los mensajes escritos y de audio de aquellos computadores y celulares incautados, para poder contar con mayores herramientas probatorias a utilizar por el Ministerio Público en los juicios correspondientes.
También se trabajará con la detección de bandas o delincuentes que se dediquen a reducir especies ofreciéndolas por plataformas digitales y redes sociales, delito que claramente va al alza.
“Si se cumplen los objetivos planteados, podremos buscar las formas de conseguir los recursos para contar con esta tecnología, pero eso se determinará más adelante”, aclara Durán.
Unidad de análisis
La estrategia de robo, incluirá la llamada “gestión del conocimiento y análisis e inteligencia policial”.
Será en las Ofan donde se manejen las bases de datos, y la información relevante que se entregarán a las unidades especializadas y contribuir al desarrollo de las investigaciones.
“Esto nos ayuda a la identificación de delincuentes prolíficos, mejorando resultados en las investigaciones a nivel nacional. En este contexto, se encuentra el mercado de bienes robado (Medbro), el que busca desincentivar la comercialización de especies adquiridas en mercados formales e informales”, apunta el subprefecto.
Se apostará, entonces -como lo ha estado haciendo la Fiscalía con su programa Sacfi- a fortalece la metodología de trabajo de análisis criminal e inteligencia policial, respecto de la capacidad de vincular delitos contra la propiedad y la venta de especies.
Ya se ha concluido, por ejemplo y basándose en los datos del Ministerio Público, que un 8% de los robos denunciados son autoría de personas conocidas por las víctimas.
Se espera que los primeros balances del IR-360 en Ñuble se realicen en julio.
