Señor Director:
La paridad es fundamental, en cuanto a la toma de decisiones. Recientemente, el informe de Género 2022 que elabora
anualmente la Comisión para el Mercado Financiero (CMF), evidenció que la mediana de la participación femenina en
directorios en los países OCDE alcanzó el 30%. En Chile, la participación de mujeres en los directorios de las empresas IPSA
llega sólo al 15%.
Históricamente los hombres son quienes han tenido altos cargos en todo ámbito y muchas veces se eligen líderes que no
son competentes para el caso, porque se confunde liderazgo con carisma. Las mujeres, por su parte, presentan mayores habilidades blandas, responsabilidad afectiva, entre otros, sin embargo, siguiendo la historia de la sociedad, no son elegidas.
La paridad permite desarrollar efectivamente esta igualdad de derechos para todos y todas, en cuanto a la toma de decisiones. La diversidad y la inclusión aumentan la productividad y la satisfacción.
Más allá de una discusión política sobre la paridad, el llamado es a entender que necesitamos democratizar las oportunidades, sobre todo para nuestras futuras generaciones. La igualdad de género implica que todas y todos podamos desarrollar
nuestras capacidades y ser un aporte para la sociedad. Hemos avanzado, es cierto, así lo demuestran distintos estudios, no
obstante, aún queda mucho por hacer. ¿Paridad de género? Obvio, ¿acaso no es el desde?
Josefa Poblete
Consultora de Economía con Estudios de Género en SOAINT