Con el fin de prevenir futuras inundaciones que afecten canales, bocatomas y predios de agricultores y vecinos de la región de Ñuble, se están llevando a cabo trabajos fluviales a lo largo del río Chillán. Fue en ese contexto que la Junta de Vigilancia constató en terreno los avances que presentan las obras, las cuales alcanzarían un 40% en el sector La Esperanza, de la comuna de Coihueco, tales trabajos forman parte de la gestión conjunta entre la Dirección de Obras Hidráulicas (DOH) del MOP y la Junta de Vigilancia del Río Chillán (JVRC).
En este sentido, el presidente de la JVRC, Héctor Jaque, sostuvo: “los trabajos van a traer como beneficios el encauzamiento del río, mejorar la caja base del cauce, esto va a permitir que en una próxima temporada de riego los accionistas a través de los diferentes canales puedan optimizar el recurso hídrico para sus cultivos, en este parámetro, estamos esperando también que esta temporada de invierno no sea tan catastrófica como los meses de julio y agosto que provocó daños irreparables en el río Chillán lo que imposibilitó que se pudieran abrir las bocatomas de forma correcta para optimizar el uso del agua”.
Por otro lado, Jaque afirmó “que estos trabajos que se están realizando en el río es por cuenta de la DOH, a través de una concesión particular, de esta forma nosotros vemos como institución que es muy beneficioso para la temporada de riego porque evita futuros daños ante eventuales crecidas en el río, y también quiero informar que al 17 de abril del presente año, el río Chillán trae consigo 3 metros cúbicos, quedando para repartir 2,48 entre los usuarios de derechos de aguas”.
Respecto a las obras, el asesor de la empresa encargada de los trabajos, Jorge Chandía, aseguró que “se trata de la contratación de 900 horas de bulldozer y 600 de retroexcavadora sobre 20 toneladas, estamos trabajando en tres puntos, el primero cerca de la bocatoma La Victoria, proyecto que se encuentra terminado, y en estos momentos estamos trabajando en el sector La Esperanza, cerca de las bocatomas Roblería y Culenar”.
El asesor a cargo agregó: “Tenemos cuatro excavadoras, y dos bulldozer trabajando continuamente con lo que esperamos tener el proyecto terminado lo antes posible. Por otro lado, el objetivo principal con estas obras es el encauzamiento del río, en sectores que fueron afectados por las crecidas del año pasado entre junio y agosto, la idea es prevenir y darle una mejor caja al río para que no ocurran graves daños nuevamente”.
La inversión destinada por el MOP para conllevar tales obras alcanzaría los 177 millones, con un total de 1.500 horas operacionales, las cuales, son realizadas en su totalidad por maquinarias pesadas con la finalidad de corregir la dirección de la afluente en diferentes puntos del río Chillán.
