Debido a la nueva cuarentena que afecta a la intercomuna, la Diócesis de Chillán realizó un Te Deum Online que fue transmitido a toda la región a través de redes sociales y de las radios El Sembrador, Alborada, Stellar e Isadora, en el marco de Fiestas Patrias.
La ceremonia fue presidida por el obispo de Chillán, padre Sergio Pérez de Arce, y contó con la participación virtual de familias y representantes de comunidades católicas de Ñuble, quienes oraron por Chile y sus habitantes en esta celebración nacional que encuentra al país en medio de la pandemia del Covid-19.
En su homilía, el padre Sergio Pérez de Arce hizo un sentido llamado a la realización de un proyecto común que nos una como país.
“Un sueño colectivo que aúne voluntades, un propósito compartido en torno al cual nos pongamos de acuerdo. Y no es porque el país carezca de desafíos y problemas. Al contrario, son muchos los temas levantados por la ciudadanía y que no se abordan con la urgencia que merecen: la pobreza dura que afecta a tantos chilenos y la precariedad de muchos, que se ha evidenciado con fuerza en esta pandemia; el tráfico y el consumo de drogas, que inunda vastos sectores de nuestras poblaciones y barrios; la violencia y la delincuencia, que tienen tantas caras que dañan nuestra convivencia”, indicó.
“En nuestra Región de Ñuble, esta novel región llena de posibilidades, vemos cordones de pobreza en nuestras ciudades y una pobreza escondida en sectores rurales; tenemos serios problemas en nuestra raíz energética que limitan nuestro desarrollo; los salarios son comparativamente bajos en relación al resto del país, y la mujer está todavía muy atrás en su inclusión a la vida laboral y otras posibilidades de desarrollo. Sí, desafíos no nos faltan, pero no los estamos enfrentando con cohesión social, con sentido de cuerpo y de amistad social, y en esto hay una gran responsabilidad de los dirigentes políticos que, contando con el encargo entregado por la ciudadanía y teniendo el liderazgo que les proporciona su especial misión, se preocupan a menudo más por obtener ventajas inmediatas pero efímeras, que por construir puentes de entendimiento. Es fundamental rescatar el sentido más genuino de la política”, precisó.
El obispo también recordó que el país se enfrentará en poco más de un mes a un plebiscito decisivo, por lo cual invitó a reforzar el sentido colectivo.
“Todo esto será posible si participamos con responsabilidad. Invitamos a votar el próximo 25 de octubre, a vencer comodidades, indolencias y temores, y aportar con nuestra opinión y compromiso a la edificación de la patria. Invitamos, sobre todo, a promover caminos de diálogo, con respeto, sin descalificaciones, sabiendo que la patria se construye en forma compartida, en base a valores esenciales que, estoy seguro, la gran mayoría del país comparte”, aseguró.