Señor Director:
Los impactos benéficos de la vegetación nativa han sido reemplazados por el monocultivo forestal. Los efectos más complejos están en los recursos hídricos debido al alto consumo de agua por las especies introducidas, en comparación al consumo de la vegetación nativa. Esta agua consumida por las forestales es conocida como “agua virtual” para la producción de cada árbol, eucalipto y pino, que require de grandes volúmenes de agua que no las devuelven a los acuíferos produciendo aridez en el suelo y disminución de las aguas subterráneas.
Considerando la distribución total de agua a nivel nacional, incluyendo aguas lluvias como recurso, el consumo agrícola representa el 37% y el forestal el 59%, tal como lo indican las metodologías actuales, derribando el mito que la agricultura sea la principal consumidora de agua. Lo sucedido en la precordillera de Ñuble, donde suelos de aptitud agrícola productora de granos y ganado terminaron en manos de forestales, por la poca rentabilidad y la nula política agrícola.
Alfredo Schmidt Vivanco
