Un tercer hecho de homicidio frustrado en lo que va de este 2025, se registró al interior de la cárcel de Chillán, luego que en horas de la tarde del pasado jueves, específicamente en el patio de condenados de la unidad penitenciaria.
Tras la agresión, personal de Gendarmería trasladó de inmediato al lesionado, identificado como Alexánder González Andrews, de nacionalidad colombiana, a la Unidad de Atención de Urgencias, del hospital Herminda Martín, mientras que el Ministerio Público, solicitó un procedimiento indagatorio al personal de la Brigada de Homicidios, de la PDI de Chillán.
Los funcionarios policiales, quienes realizaron el trabajo de empadronamiento dentro del recinto penal, explicaron que el imputado por este delito, sería un recluso de nacionalidad chilena.
De acuerdo a lo declarado por el jefe de esta unidad, subprefecto Raúl Sánchez, el agredido, quien pese a estar en condición de imputado, se encontraba en el patio de condenados”.
Es en ese lugar donde es atacado con un arma cortopunzante de fabricación artesanal.
“Lo agrede en la región del tórax y en el cuello. Se encuentra en el hospital de Chillán, actualmente, en recuperación”, afirmó.
En el lugar, la PDI logró levantar el arma utilizada, conseguir las imágenes registradas por las cámaras de seguridad e incluso conseguir testimonios de testigos, con lo que confeccionaron una carpeta de antecedentes que ya fue evacuada a la Fiscalía Local de Chillán.
Desde Gendarmería, la directora regional de Ñuble, coronel Carolina Caamaño, se refirió al actuar del equipo de funcionarios, “que estuvo atento para trasladar rápidamente al interno herido a la enfermería del penal y posteriormente llevarlo de urgencia al hospital de Chillán, donde se mantiene bajo los cuidados médicos para su recuperación”.
Agregó que “estamos disponibles para colaborar con firmeza en la investigación penal, además de disponer a primera hora del día de hoy, un completo registro y allanamiento en el recinto penitenciario que permitió la incautación de elementos prohibidos con el fin de minimizar los riesgos de agresión entre internos y/o a funcionarios de nuestra institución”.
El último ataque entre reos con resultados fatales registrados en el centro de cumplimiento penitenciario de Chillán, se registró en diciembre de 2024, como resultado de una riña entre dos internos.
En esa ocasión, y al igual que los sucesivos homicidios frustrados registrados este 2025 (incluyendo uno que afectó a un funcionario) se ejecutaron con armas cortupunzantes confeccionadas por los mismos internos.
