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En el marco de la alerta temprana preventiva decretada por Senapred, sumada a la activación del “Botón Rojo” de Conaf debido a las altas temperaturas que afectan por estos días a la Región de Ñuble, autoridades locales realizaron un punto de prensa a las afueras de la Delegación Presidencial de Ñuble, para entregar un balance respecto a la prevención y existencia de incendios forestales que afligen a la región.
En comparación con enero del año 2023, hasta la fecha existen 140 incendios registrados en la Región de Ñuble, un 54% menos en relación con el año anterior, donde existieron 302 incendios consumados. De estos 140 incendios, 99 han sido investigados por Conaf, de los cuales 78 fueron producidos por la intervención humana.
En medio del incremento de las temperaturas, y al ser consultado por el desarrollo de incendios en la región durante las últimas horas, Ramírez señaló que “ayer hubo cuatro incendios y anteayer cinco, lo que significa que hubo nueve incendios en dos días. Anoche por ejemplo, estuvimos con bomberos en conjunto con brigadas de empresas forestales y brigadistas nocturnos de Conaf trabajando dos incendios simultáneos en la comuna de San Ignacio. Antes de ayer en San Nicolás, se produjo un incendio que dejó dos hectáreas consumidas porque una persona estaba quemando restos de materiales de construcción; y durante la misma jornada en la comuna de Quirihue, estaban quemando basura en Manquimiliu”.
Según datos entregados por Conaf Ñuble, la región posee una susceptibilidad del 91,5% en ignición de incendios forestales, siendo la región con más superficie en riesgo del país. Asimismo, durante el año 2023 se sufrió la pérdida total de 57 mil hectáreas, entre las que se incluyen postas rurales, escuelas, colegios y APR en distintos puntos de la Región de Ñuble.
Riesgo simultáneo
En esa línea, el delegado presidencial, Anwar Farrán, enfatizó que durante los próximos días podrían haber incendios simultáneos en distintas partes de la región, debido a la presencia de ráfagas de viento que podrían llegar hasta los 50 kilómetros por hora. “Durante este día y durante la noche del fin de semana, podrían haber situaciones complejas debido a la presencia de ráfagas de viento que debieran llegar hasta los 50 kilómetros por hora. De lo anterior, podría existir la posibilidad de incendios simultáneos debido a una ventana de cinco horas para la inmisión y propagación eventual de estos. Por lo mismo, se hace un llamado a la ciudadanía a tomar todas las medidas preventivas y de seguridad, para evitar tragedias como las que hemos tenido el último tiempo en la Región de Ñuble”, declaró el delegado presidencial de Ñuble.
Llamado al cuidado
Debido a las altas temperaturas que afectarán a la Región de Ñuble durante los próximos días, la seremi de Salud, Ximena Aguilera, hizo un llamado a la ciudadanía y entregó algunas recomendaciones para afrontar de buena forma esta ola de calor.
“Queremos hacer un llamado de precaución a toda la población ñublensina debido a la presente ola de calor. Nuestras recomendaciones para la ciudadanía son el uso de ropa holgada, ojalá clara y de manga larga, para protegerse de los rayos UV; usar regularmente el bloqueador solar en caso de salir a la intemperie; evitar los horarios de mayor calor desde las 11 de la mañana hasta las 17 de tarde; consumir entre un litro y medio a dos litros de agua por persona y utilizar elementos de protección personal (jockeys, sombreros, quitasoles)”.
Por su parte, desde el Servicio de Salud Ñuble (SSÑ) también comunicaron consejos. “Queremos que la comunidad se cuide frente a la ola de calor que estará presente en la zona centro sur del país durante los próximos días y también durante sus vacaciones. Es en esa línea, que nuestro equipo de profesionales ha sido enfático en entregar múltiples recomendaciones para cuidar la salud, especialmente orientadas a las personas de mayor vulnerabilidad, entre ellas, quienes tienen enfermedades crónicas”, destacó la directora del SSÑ, Elizabeth Abarca Triviño.
La Dra. Michelle De Arcas Orellana, subdirectora (s) de Gestión Asistencial del SSÑ, precisó que, “las personas diagnosticadas con alguna enfermedad crónica tienden a ser más vulnerables, ya que sus condiciones basales pueden generar una alteración en la percepción de calor o deshidratarse más rápido que los demás, debido a los tratamientos farmacológicos que mantienen a diario, lo que podría traer como consecuencia la desestabilización de patologías cardiovasculares, metabólicas y endocrinas”.
Texto: Luciano Gallardo
