Los “diablos rojos” perdieron a su jugador más rápido en ataque y una de las piezas claves para hacerle daño, este jueves, a las 20.00 horas, a la Liga de Quito de Ecuador, por el duelo de revancha de los octavos de final de la Copa Sudamericana, y de cara al duelo del martes 15 de agosto, a las 12.30, frente a Unión La Calera en Chillán
Se trata del delantero Bayron Oyarzo, quien se “apretó” en la derrota frente a Cobresal por 2-1 y debió abandonar el campo de juego.
El cuerpo médico lo evalúo y quedó descartado para los duelos con los ecuatorianos y contra los caldeanos, rival directo en la lucha por alejarse de la zona de riesgo en el Torneo Nacional.
Plantel diezmado
Ahora el plantel de Ñublense carece de dos cartas en ataque. No podrá estar Oyarzo y aún no está disponible Andrés Vilches, quien viene saliendo de una dolencia física que lo ha alejado fuera de las canchas durante casi un mes.
Las cartas para el ataque don Patricio Rubio, Ismael Sosa, Álex Valdés y como mediapunta o extremo mentiroso Pablo Aránguiz.
“Sabemos que iremos a jugar nuestra revancha porque tenemos que intentar ganar para ir a los penales”, comentó Jaime García, quien tras un largo viaje, junto a su plantel, arribaron este martes a las 4.45 de la madrugada y por la tarde entrenaron en las instalaciones de un club ecuatoriano de Segunda División.
Ñublense está obligado a ganar por un gol de diferencia en la altura de Quito para llevar la definición a los lanzamientos penales o ganar por más de dos goles si quiere clasificar directo a los cuartos de final,
Si pierde o empata, se despedirá del certamen internacional, donde es el único equipo chileno sobreviviente, y tendrá que concentrarse exclusivamente en su lucha por no descender.
“Esto es fútbol, es un partido complicado, pero vamos a competir, a jugar con todo”, advirtió el capitán Giovani “Chucky” Campusano.