Minuto 89. Penal para Ñublense. Nicolás Vargas toma la pelota, pero luego se la cede al goleador Nicolás Guerra, quien hace un par de minutos había sido víctima de penal (Arias le metió un codazo).
El técnico Jaime García salta desde la banca desesperado y ordena que la ejecución sea del capitán. El defensor toma de nuevo la pelota, se para con frialdad ante Fernando de Paul y remata cruzado al poste de la mano izquierda.
Golazo. Desahogo. Festejo y delirio en la barra ñublensina, frustración en la de Universidad de Chile.
Así, con un penal agónico, historiado y tenso, el elenco de Jaime García selló una sufrida, trabajada, pero merecida victoria en el estadio Nelson Oyarzún de Chillán, para alejarse de la zona del descenso y volver a soñar con un cupo a la Copa Sudamericana.
El Rojo se reencontró con el triunfo en casa tras cinco fechas sin ganar, apelando a un gran trabajo defensivo, a una aplaudible capacidad colectiva para circular el balón con criterio.
Figuras excluyentes fueron Jovany Campusano, que estuvo impasable por la banda izquierda, Federico Mateos, con un recorrido y desgaste impresionante, Nicolás Vargas, que junto a Guerrero neutralizaron a Larrivey, el portero Nicola Pérez, que devolvió la seguridad al arco chillanejo y Guerra, que si bien desperdició un par de ocasiones, fue agente de peligro permanente.
La convulsionada Universidad de Chile tuvo un buen arranque, pero lentamente se fue diluyendo, porque Ñublense presionó y comenzó a explotar las bandas.
La U apostó por ataques directos buscando a Larrivey, porque poco fútbol tiene, pero Ñublense anticipó con agresividad y fue ganando en intensidad en la recta final, con mucha concentración defensiva, dinámica en las transiciones y mucha movilidad en ataque.
Sobre el final, la U sintió que no tenía respuestas para ganar y Ñublense detectó que siendo un poco más insolente y profundo, podía ganarlo. Y así fue. Pelotazo para Guerra, codazo de Arias, pitazo de Jona y zapatazo de Vargas para devolverle la alegría a la hinchada ñublensina.
Ñublense trepó al octavo lugar con 37 puntos y visita el domingo, sin Vargas, Guerra ni Guerrero (salió lesionado), a O’Higgins en Rancagua, mientras la U. de Chile, con 34, quedó a un puesto de la promoción y choca con la U. Católica.
La voz del capitán
“Era importante ganar para alejarse de la zona baja. Siempre he dicho que estamos para cosas grandes, solo nos teníamos que focalizar. En el penal me dediqué a acomodar la pelota, puse la mente en blanco y estuvo tranquilo para pegarle fuerte”, confesó el Nico Vargas, autor del penal que desató un carnaval en Chillán.
“Necesitábamos este triunfo. Era necesario ganar este partido. Jugamos como equipo y tuvimos mucha concentración. Yo me identifico mucho con este equipo”, sentenció el DT Jaime García.