Estado Regional, mayor autonomía y descentralización son ideas que comienzan a repetirse a la hora de hablar de la nueva propuesta de Constitución. Gaspar Domínguez, conversó con Diario Concepción y explicó lo que a su juicio son los aspectos más relevantes en este ámbito, que sostuvo es un avance, algo mucho mejor que lo que existe hoy.
¿A su juicio la actual propuesta va a lograr que las regiones puedan tener un rol más importante que el actual?
Bueno, efectivamente, la propuesta de nueva Constitución ofrece elementos de transformación profunda que busca de una vez por todas, invertir la jerarquía de toma de decisiones, donde hoy se toman a nivel central y no en las regiones ni en las comunas, y que la política pública y la forma de Estado se construya desde las localidades hacia el nivel central. Yo creo que el modelo de Estado regional es un modelo que entrega las herramientas para avanzar a la descentralización profunda, pero no es una varita mágica, sino más bien un punto de partida para organizar una forma de Estado distinta.
¿Podría enumerar algunos de esos cambios que se proponen en el nuevo texto y que marcarían esa diferencia?
El Estado Regional es un capítulo de la Constitución y tiene múltiples cosas. Básicamente agrega que las regiones tengan autonomía para gastar su plata, autonomía para recaudar algunos tipos de tributación según establezca la ley. Autonomía para tomar decisiones propias. Autonomía para poder decidir en que se gasta la plata y no quiere. De Santiago tiene todo resuelto. Autonomía para solicitar transferencia Competencia en materia de servicio público Se puede profundizar la democracia local con consultas, plebiscitos de definiciones locales La escritura de un estatuto regional para que cada región se pueda dar sus propias reglas de funcionamiento, la capacidad que pueden hacer empresas públicas para responder a necesidades locales. La capacidad de poder -con restricciones- pedir empréstitos para poder resolver problemas puntuales, las atribuciones nuevas que adquiere el Consejo Regional y el Gobernador Regional, que va a permitir dotar de mayor autonomía. Es una larga lista de razones que fundamentan el por qué las personas que habitamos regiones vamos a tener mucha más autonomía actualmente.
¿Hay quienes critican que la nueva propuesta crea unas serie de órganos nuevos sin que exista la necesidad, qué opina usted al respecto?
Quien diga que aumenta la institucionalidad debería decir de dónde saca eso, porque no se crea ningún órgano nuevo en el capítulo de Formas de Estado, en otros capítulos se forman la defensoría de la naturaleza, defensorías públicas, pero en materia de Formas de Estado no hay ningún órgano nuevo. Entonces no soy yo el que tiene que decir porque no, el que diga que hay órganos nuevos va a tener que establecer cuáles, porque yo no conozco a ninguno.
El no tener una Cámara Alta, un Senado, será conveniente, ¿La Cámara de las Regiones tendrá el mismo peso político?
Mira, tú estás partiendo de la base de comparar con lo que ya existe. Esto es una organización de Estado distinta, esto es un Estado Regional, donde las definiciones de las políticas públicas, las decisiones, se toman prioritariamente en las comunas y en la región, y secundariamente a nivel central. Se invierte la pirámide de toma de decisión y como está orientado en las regiones, porque es un Estado Regional, la representación política de los Órganos de Deliberación Nacional se entiende que también debe ser por regiones. Entonces tiene que haber una Cámara de la Regiones. Y en esta Cámara toda la regiones deben pesar lo mismo. Es decir, la Región de Ñuble, la Región del Biobío y la Región Metropolitana deben tener la misma cantidad de representantes (…) Entonces, es una forma de Estado, con un régimen político y un sistema político distinto que está pensado desde las regiones. Entonces yo creo que no es tan fácil como ponerlo en clave tiene más o menos peso, tiene otra configuración, porque hoy día tenemos una configuración de un Estado unitario, centralista, donde las decisiones las toma Santiago para la región y punto. Este es un Estado pensado desde las regiones.
Texto: Pablo Carrasco
