Señor Director:
La tradicional cadena de comercialización de los pequeños productores de papas lo explica todo. Son 8 intermediarios que tiene la papa producida en las importantes regiones paperas del sur, antes de alcanzar el cliente final, específicamente en Santiago.
El pequeño agricultor papero vende su producción a un comprador que llega a su predio y éste vende a una bodega mayorista de la ciudad más cercana y ese mayorista envía la carga a Santiago. Una vez arribada la mercadería al gran mercado de comercialización de la capital, esta se vende a mejor postor, la que es adjudicada por un consignatario (la totalidad o un lote). A continuación, tal consignatario vende a un mayorista y este a un distribuidor detallista. Luego, ese distribuidor vende el producto a los pequeños comercios al por menor (almacenes de barrio, puestos de ferias libres, minimarket, etc). El último eslabón es la venta directa al consumidor final.
Sólo en las ciudades cercanas a los centros productores de papas y donde la relación productor-consumidor es más directa, desaparecen algunos intermediarios. La cadena se acorta y los precios de compra-venta, favorecen tanto al agricultor como al consumidor.
Marcelo Moraga A.