Aprovechando las buenas condiciones de nieve, este viernes se realizará la apertura de la temporada de esquí en Nevados de Chillán, lo que sin duda es el principal hito turístico del año en Ñuble. Basta decir que el año pasado se registraron cerca de 70 mil esquiadores y que para este año se prevé el arribo de 90 mil.
Se trata del único destino de carácter internacional de la nueva Región, que reporta importantes dividendos no solo a la empresa que tiene su concesión por 30 años y al municipio de Chillán, dueño de un predio de casi 10 mil hectáreas, sino que también beneficia a otros actores de la zona en rubros como el comercio, servicios y transporte. En el gobierno local están conscientes que tienen un diamante aún en bruto y asumen que puede reportar mucho más que los $4.000 millones que ha dejado los últimos 11 años por concepto de la concesión, pero sigue pendiente la confección de un plan maestro para la explotación de los bienes con que cuenta el municipio chillanejo en la montaña.
Las Termas de Chillán ha empujado también el desarrollo de Las Trancas, sumando un total de 4 mil camas junto a los hoteles de la montaña. Esta cifra no deja de ser significativa, puesto que supera la oferta de Concepción y es aún una oportunidad poco aprovechada para desarrollar actividades durante todo el año.
Pero el rentable negocio de la nieve también ha permitido proyectar este destino para el desarrollo del turismo outdoor en toda temporada, así como también el turismo de negocios. Además, la información proveniente del mercado inmobiliario indica que en esa zona seguirá potenciándose la inversión en segunda vivienda.
Sin embargo, para que este destino aspire a ser de categoría mundial debe superar ciertas falencias que si bien no han frenado el desarrollo del negocio, podrían convertirse en graves obstáculos si se quiere pensar en grande.
En ese sentido, mejorar la infraestructura de servicios en Las Trancas es el principal desafío del sector público y también del privado. Para ser más precisos, es esencial contar con un sistema sanitario moderno, que contemple una red de agua potable y alcantarillado de la misma categoría que existe en las urbes, así como también, potenciar la oferta de entretención.
No es aventurado pensar que Las Trancas avance en su crecimiento para convertirse en una ciudad de montaña, siguiendo el modelo de pequeñas urbes en Norteamérica y Europa, con un variado equipamiento que considere, además de los tradicionales servicios de arriendo de equipos, cafeterías y hospedaje, la presencia de mayor variedad de restaurantes, supermercados, discotecas, pubs, farmacias e incluso un casino de juegos, como alguna vez existió.
La nieve efectivamente es un buen negocio, pero después de las 18 horas esta zona debe ser capaz de ofrecer una variedad de actividades que hagan de este destino un lugar entretenido, moderno y sustentable, donde todos ganen.