Neurodiversidad en el debate educativo

Señor Director:
En atención a la contingencia de las últimas semanas, me permito expresar mi inquietud por la instrumentalización del concepto de neurodiversidad en el debate educativo. La idea, originalmente destinada a valorar la variabilidad neurológica como parte natural de la diversidad humana, ha sido tergiversada para evadir la responsabilidad de mejorar las deficiencias estructurales del sistema. En lugar de promover espacios educativos críticos y transformadores, se utiliza este concepto para justificar la inoperancia de autoridades, instituciones y, en ocasiones, la pasividad de algunos padres.
Asimismo, el “doble problema de la empatía” que plantea Milton evidencia cómo los prejuicios y la falta de compromiso impiden una verdadera integración y diálogo en nuestras aulas. Es imperativo, pues, que se fomente una educación que no solo reconozca las diferencias neurológicas, sino que también exija un compromiso ético y activo de todos los actores sociales.
Mg. Álvaro Arias-Espinoza
Profesor de Historia y Geografía