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La segunda noche del Festival Internacional de la Canción de Viña del Mar quedará grabada en la memoria de todos los presentes como una noche de éxito total, en la que Andrea Bocelli, el renombrado tenor italiano, triunfó en el escenario en compañía de una orquesta compuesta por 114 músicos y coristas.
La presentación, que se extendió por casi dos horas, concluyó con el público exigiendo la Gaviota de Platino para Bocelli quien ya se llevaba los galardones de gaviota de Oro y la de Plata, las cuales fueron diseñadas especialmente para él y contaban con el sistema braille.
Entre los músicos que compusieron la orquesta se encuentran Vicente Vaccani, flautista y profesor de la Escuela Artística Claudio Arrau de Chillán y el sancarlino Felipe Méndez, piccolo y flauta de la Orquesta Sinfónica Ñuble y también integrante de la Sinfónica Nacional.
Vicente Vaccani, expresó que “ha sido una de las experiencias más impactantes y conmovedoras de mi vida y carrera. Primero por ser el Festival de Viña y más importante aún por Andrea Bocelli, quien es un cantante a nivel mundial e histórico”.
“Quedé gratamente sorprendido con la aceptación del público. Vi gente emocionada hasta las lágrimas con el show. Me sorprende, ya que siempre ha existido el prejuicio de que la música docta es aburrida. Es un desafío pasar de un teatro de no más de 1.200 personas a un escenario como la Quinta Vergara”, comentó el músico Felipe Méndez.
Una curiosidad sobre el concierto es que los músicos no conocían el repertorio que iban a interpretar hasta el mismo día del concierto, debido a las estrictas medidas de seguridad impuestas por la producción para que no se filtrara a la prensa.
La preparación fue, por ello, un desafío, ya que solo tuvieron dos ensayos el día domingo con el director con quien Bocelli trabaja.
Felipe Méndez afirmó que “el nivel de producción es increíble, al igual que la calidad de los artistas. Siempre es un desafío tocar con artistas de talla mundial, ya que la orquesta suele ensayar sin ellos. Andrea Bocelli llegó el mismo día del festival y tuvimos 45 minutos para ensayar con él”.
“El nivel en Ñuble es increíble; los conciertos realizados en el Teatro Municipal de Chillán y en el resto de las ciudades son reflejo de ello. Ha sido maravilloso llevar la música a otros lugares, como integrante de la orquesta, buscamos descentralizar la música y la cultura. El hecho de estar tocando en un evento tan grande lo hace muy especial; muchos alumnos, apoderados y colegas de la escuela artística pudieron verme, y estoy orgulloso de ello”, agregó Vaccani.
Texto: Javiera Figueroa
