Cada martes en las sesiones del Concejo Municipal, la cantidad de fotografías que son enviadas por diversos vecinos mostrando el mal estado de sus caminos, son literalmente, incontables.
Evidentemente, las envían a sus concejales para que ellos expongan su problemática en busca de soluciones, ojalá inmediatas.
[bg_collapse view=”button-orange” color=”#4a4949″ expand_text=”Leer más” collapse_text=”Menos” inline_css=”width: 100%” ]Sólo por nombrar los sectores que más se repiten en estas solicitudes, se podría destacar a Las Coles, El Litral, Confluencia, Esperanza de Cato, Santa Raquel, Reloca, Capilla Cox, Malloa Norte, Callejón Bustamante y los callejones que desembocan en el Camino a Las Mariposas.
“Esto es una crisis más que un problema”, comentó la concejal Brígida Hormazábal, quien admitió que “no damos abasto, porque contamos con apenas dos motoniveladoras, una arrendada y la otra nuestra, pero que se lo pasa mala”.
Y es con este conflicto como telón de fondo que desde la Municipalidad de Chillán anunciaron que ya se declaró admisible la puesta en marcha de un proyecto Circular 33 del Fondo de Desarrollo Regional que le permitiría al municipio acceder a recursos por cerca de $680 millones para adquirir maquinaria propia y realizar las mantenciones sin tener que acudir a la externalización del servicio.
El administrador municipal, Richard Guzmán, explicó a LA DISCUSIÓN que “estamos a la espera de que el Gobierno Regional lo pueda priorizar para financiamiento, lo que nos permitiría comprar otra motoniveladora cuyo costo bordea los $300 millones, junto con un camión tolva para poder equipar de manera más eficaz a las cuadrillas de mantenciones de caminos de la Municipalidad. Conforme a las estimaciones municipales, el proyecto en total bordea los $680 millones”.
Años sin mantención
Conforme a la concejal Hormazábal, una de las razones por las que en la actualidad los caminos urbanos y rurales presentan un nivel de deterioro riesgoso se debe en parte al mayor flujo vehicular y “a que durante los primeros años de esta pandemia, especialmente en el tiempo en que había fuertes restricciones de movilidad, los caminos nunca fueron mantenidos, que es algo que se debe hacer de manera periódica, pero no se hizo y ahora vemos las consecuencias”.
La edil apuntó, además, a “una confusión que tiene la gente”, en relación a las solicitudes que a diario reciben para reparar calles o caminos enrolados cuya mantención no son de responsabilidad municipal, sino del Serviu y de Vialidad.
Mientras en el Serviu anunciaron que esperan en septiembre contar con la aprobación de una cartera de 37 proyectos de Pavimentación Participativa para 10 comunas, entre ellas Yungay, San Nicolás, Chillán, Chillán Viejo, Quillón, San Carlos, Portezuelo, San Ignacio y El Carmen.
La semana pasada comenzó la reconstrucción de la calle principal de Rucapequén, proyecto que mejorará el trazado de 969 metros lineales de longitud y 8 metros de ancho, por un monto de $762 millones.
En tanto, en el Ministerio de Obras Públicas detallaron que ya se encuentran en proceso de revisión, bajo tuición MOP y a través de una empresa de Contrato Global, de la ruta N-545 Camino a Las Mariposas, que comprende desde el km 10,5 (sector Pasaje Los Puentes) hacia el límite con Coihueco.
En el lugar ya se realizó limpieza de faja y se solicitó cambio de señalética.
También se realizó la confección del alcantarillado del cruce Laurel de Oro-Reloca (Ruta N-471), más reperfilados en el cruce Chillán-Tres Esquinas-San Fabián (del kilómetro 31 al 52); el del cruce de Oro Verde-Portezuelo; Parque Lantaño- Ñuble Alto; cruce Colliguay- Quinchamalí; Altos Colliguay-Quinchamalí (ex Balsa) y del cruce Caserío Linares-Estación Colliguay.
Finalmente, el pasado viernes se concluyeron los trabajos de reposición de rodaduras de concreto asfáltico en el cruce del camino a Nahueltoro con el Camino del Agua.
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