Cinco ministros y otros altos funcionarios del gobierno del presidente izquierdista argentino, Alberto Fernández, pusieron sus cargos a disposición este miércoles, tres días después de un fuerte revés electoral en las primarias legislativas, que ponen en riesgo la mayoría oficialista en el Senado.
El ministro del Interior, Eduardo “Wado” de Pedro, fue el primero en ofrecer su renuncia. Poco después le siguieron los titulares de la cartera de Justicia, Martín Soria; de Ciencia, Roberto Salvarezza; de Ambiente, Juan Cabandié; y de Cultura, Tristán Bauer, considerados como cercanos a la vicepresidenta Cristina Kirchner.
“Escuchando sus palabras del domingo por la noche donde planteó la necesidad de interpretar el veredicto que ha expresado el pueblo argentino, he considerado que la mejor manera de colaborar con esa tarea es poniendo mi renuncia a su disposición”, escribió De Pedro en la carta que presentó a Fernández según dio a conocer el sitio de la DW.
El domingo, en primarias para elegir a los candidatos a las legislativas de medio término, la coalición gobernante Frente de Todos (peronismo de centro-izquierda) obtuvo menos de 31% de los votos a escala nacional.
La coalición de centro-derecha Juntos por el Cambio, del expresidente Mauricio Macri (2015-2019) obtuvo 40% de los sufragios y le sacó una ventaja de cinco puntos al oficialismo en la provincia de Buenos Aires, tradicional bastión peronista.
Se trata de un resultado inesperado que hace temer al gobierno por su mayoría en el Senado y aleja la posibilidad de lograrla en la Cámara de Diputados cuando el 14 de noviembre se celebren los comicios para la renovación parcial del Congreso.
Voto de castigo
Consultada por la DW, la derrota electoral del oficialismo fue “para castigar al Gobierno” afirmó Mariana Llanos, investigadora del Instituto de Estudios Latinoamericanos del Instituto GIGA de Hamburgo. “Pero la oposición no aumentó demasiado su caudal de votos, mientras el Gobierno sí perdió muchos”, agrega.
En medio de la pandemia, la experta destacó la alta participación en los comicios: “No se ve una crisis de representatividad, como, por ejemplo, en Brasil, sino que los argentinos expresaron su descontento y votaron por la oposición.”
El Gobierno de Alberto Fernández había previsto una salida gradual de las restricciones, la reactivación económica, y otorgó ayudas individuales en la crisis del coronavirus. Pero el mensaje de las urnas es claro: “El resultado de las primarias fue un golpe muy duro e inesperado para el Gobierno, y la sorpresa fue, sobre todo, la amplitud de la derrota, que se extiende por todo el país”, agregó a la televisión pública alemana, Gabriel Puricelli, sociólogo y analista político del Laboratorio de Políticas Públicas, desde Buenos Aires. “Es la peor elección del peronismo unificado desde que se creó, en 1946”, subrayó.
“La oposición de Juntos por el Cambio se beneficia esta vez de las debilidades del Gobierno de Fernández”, tras el fracaso de Mauricio Macri en 2019 al no haber sido reelecto, analizó Puricelli.