El ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno, se reunió ayer en Chillán con los dirigentes de la Junta de vigilancia del río Ñuble (JVRÑ), para explicarles la situación contractual de la concesionaria del embalse La Punilla, filial de Astaldi, destacando la activación del cobro de una boleta de garantía por un incumplimento “grave” del contrato, y manifestó que la cartera está a la espera de la reacción de la compañía para evaluar su continuidad en el proyecto.
En la cita también participó el ministro de Agricultura, Antonio Walker; el subsecretario de Obras Públicas, Lucas Palacios; el intendente de Ñuble, Martín Arrau; el secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Riego, Federico Errázuriz; parlamentarios y autoridades locales. Al salir, Moreno detalló las medidas que ha adoptado la cartera luego que Astaldi no enterara el total del capital de la sociedad concesionaria Aguas de Punilla y aceptó solo una pregunta de la prensa.
El secretario de Estado explicó que “de acuerdo al contrato, Astaldi tenía 36 meses como máximo para enterar el capital de la sociedad que iba a construir o que va a construir este embalse, por un total de $40 mil millones, de esos, la empresa puso cinco mil al inicio, cuando se constituyó la sociedad; tres mil posteriormente, y según nos han informado, habría puesto un saldo para llegar a un total de 14 mil, por lo tanto, hoy habría un faltante de $26 mil millones que debió haber constituido, como máximo, el sábado 10 de agosto, por esa razón, el lunes 12 se le pidió que, de acuerdo a lo que establece el contrato, nos certificara que esos fondos se encontraban en la compañía y ese mismo día la empresa nos informó que no habían concretado, que solo tenían 14 mil (…), que es un requisito esencial del contrato, por esa razón, el 13 de agosto, el MOP ejerció el derecho que le da el contrato, de solicitar el pago de la póliza de garantía que ellos tienen por 460 mil UF, que se utiliza para faltas graves al contrato”.
Moreno manifestó, sin embargo, que “esta falta, de continuar, también da origen a la posibilidad de caducar ese contrato, porque sin esos fondos y sin esa responsabilidad, es difícil cumplir con el contrato, por lo tanto, eso es lo que vamos a hacer en los próximos días, seguir avanzando en que esta empresa cumpla el contrato o bien que el contrato se termine, de acuerdo a lo que establece la ley y el contrato”.
“Le hemos explicado a los regantes que el objetivo del Gobierno es hacer el embalse Punilla, nos interesa que sea una realidad, que no se pierda lo que hemos avanzado, lo haremos con este contrato, si es que se cumple, o lo haremos en una forma distinta una vez resuelto este contrato”.
Consultado por el tiempo que esperarán una reacción de Astaldi, insistió en que “ahora, lo que tenemos que esperar son las reacciones de la compañía, que está siendo intimada a cumplir con el contrato, con el cual ya ha fallado, y de acuerdo a eso tomaremos las acciones que correspondan”.
LA DISCUSIÓN intentó sin éxito obtener una declaración de la filial chilena de Astaldi, desde donde expresaron que por el momento no se referirán al tema.
Tranquilidad
Por su parte, Margarita Letelier, presidente de la JVRÑ, expresó que el ministro “nos ha traído una cuota muy grande de tranquilidad, esperábamos esta visita, pero no esperábamos que fuera tan protocolar, con dos ministros, diciéndonos los pasos a seguir, y esa tranquilidad queremos transmitirle a nuestros regantes, porque ellos hace un año están bastante desencantados con respecto al embalse La Punilla”.
La dirigente valoró “la importancia que se le ha dado, al venir a la región” y se mostró satisfecha con la decisión “de tener un delegado especial, un inspector fiscal, que esté abocado únicamente al embalse Punilla, lo que yo creo son señales súper potentes y le agradecemos al ministro que haya tomado esta determinación con la celeridad que lo hizo”.
En cuanto a los tiempos, Letelier estimó que se espera resolver la situación con Astaldi dentro de los próximos dos meses.
Próximos pasos
El diputado Jorge Sabag advirtió que el mejor escenario para La Punilla es que la concesionaria entere a la brevedad el total del capital exigido, pues ello evitaría tener que enfrentar un término anticipado del contrato y una nueva licitación.
“Nos conviene que la empresa cumpla, que entere los 26 mil millones que se van a solicitar ahora por la vía judicial, y de no ser así, habría que cambiar a otra empresa”, expresó el parlamentario.
En ese sentido, afirmó que “está bien solicitar la caducidad del contrato, porque se certificó el incumplimiento y se inicia un proceso de caducidad que terminará en su momento, de aquí a fin de año, si se cumplen los plazos, y ahí el Estado queda en condiciones de tener una nueva empresa concesionaria”.
Asimismo, el intendente Martín Arrau, reiteró el compromiso del Gobierno con este proyecto.
Consultado por el escenario que se abriría si se pone fin al contrato, la autoridad regional declaró que “hay que ir dando paso a paso, el contrato está en manos de Astaldi, y lo que pueda pasar después se verá en su minuto, pero hoy estamos concentrados en esa etapa”.
Respecto a un eventual abandono del modelo de concesiones para financiar La Punilla y hacerlo con recursos fiscales a través del DL 1123, sostuvo que “hoy, cuando hay un contrato vigente, es muy complicado aventurar opciones, hoy estamos concentrados precisamente en cautelar que se cumplan las diferentes cláusulas del contrato”.
Arrau explicó que “con el incumplimiento del contrato se activan ciertas cláusulas, y esos son procesos que toman sus tiempos, porque la compañía tiene que responder por qué no cumplió. Recordemos que la Ley de Concesiones hace que los contratos sean activos importantes de las compañías y tienen una cautela importante, por lo tanto, cuando uno quiere caducar o terminar un contrato de concesión es un proceso que toma su tiempo y es engorroso, porque efectivamente se le está quitando un activo, por tanto aquí se gatilla ese proceso, pero no es instantáneo”.
