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El sector de Parque Lantaño se ha convertido en un polo habitacional de Chillán. Son más de 25.000 las familias que residen en la zona y los proyectos urbanos e inmobiliarios se enfocan en el sector.
Eso sí, algunas de esas obras han sido esperadas por más de 20 años, como lo es el paso bajo nivel en la línea férrea que atraviesa el lugar, el cual en 2023 tuvo recién su Recomendación Satisfactoria (RS) y este año, según lo informado por el Gobierno Regional (GORE), comenzarían las expropiaciones en el sector donde se quiere construir esta importante obra de conectividad.
No obstante durante los últimos meses se sumó otro proyecto de gran impacto para la conurbación y las comunidades cercanas, el cual pretende construir 950 departamentos en 18 torres de cinco pisos cada una. Iniciativa privada que genera molestia entre los habitantes ya instalado en el sector.
En febrero ingresó al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) la declaración de impacto ambiental del proyecto habitacional, por parte de la Constructora Manzano y Asociados Ltda. Si la evaluación procede de manera correcta y se aprueba el proyecto, la construcción sería inminente, estando concluidas en un lapso de ocho años, para el 2032. ¿El temor instalado? El alto flujo vehicular proyectado, en una zona ya saturada en horas peak.
El proyecto incluye la edificación de 950 departamentos destinados a vivienda, distribuidos en 18 edificios de cinco pisos cada uno, sin ascensores. Además, se prevé la construcción de 993 estacionamientos, 519 espacios para bicicletas, siete locales comerciales, instalaciones adicionales y áreas verdes.
El presupuesto total de las obras asciende a US$63,7 millones, y se compone de cinco fases constructivas, una de las cuales ya comenzó con la edificación de 240 departamentos.
Al ser obras mayores, la participación ciudadana es primordial para conocer la visión de todos los vecinos cercanos al proyecto, y se contempla en el proceso de evaluación ambiental, si es solicitado. Es por eso que se constituyó una organización, conformada por diversas juntas de vecinos de Camino Parque Lantaño, para ver las amenazas que advierten las comunidades, relacionadas, sobre todo, a la congestión vial que se genera todos los días en la zona.
Los requerimientos ya fueron presentados al Servicio de Evaluación Ambiental (SEA) el pasado 14 de mayo, las cuales fueron ingresadas dentro del proceso de evaluación del proyecto.
Junto con las comunidades, diversas entidades de la región también ingresaron sus observaciones, relacionadas a la cantidad de áridos a ocupar en el proyecto, planes de emergencia y contingencia, manejo de residuos, emisiones contaminantes, o temas relacionados al uso de suelo.
Todos esos requerimientos fueron ingresados por la Seremi de Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo, Salud y Medio Ambiente. Junto además con la Municipalidad de Chillán y la Dirección General de Aguas con la de Obras Hidráulicas, correspondientes al MOP Ñuble.
Participación ciudadana
Los vecinos de Camino Parque Lantaño han integrado los procesos de participación que se han gestado por parte del SEA y la misma empresa, junto con otros actores interesados.
El SEA Ñuble decidió abrir dicho proceso de participación ciudadana (PAC) el pasado 4 de abril.
Mediante una vocería, el SEA Ñuble indicó que se dio paso a la difusión, donde “se realizaron diversas actividades de comunicación. Por una parte, se publicó un aviso en un periódico de circulación regional y en una radio local. También se instalaron afiches en el área de influencia del proyecto, se difundió el proceso vía WhatsApp y correos electrónicos, además de publicaciones en las distintas redes sociales del Servicio de Evaluación Ambiental. Adicionalmente, se solicitó apoyo a la Municipalidad de Chillán”.
En cuanto a las instancias en sí, se ejecutaron “entre el viernes 12 de abril de y el viernes 10 de mayo, el cual incluyó actividades presenciales en el territorio. La primera de ellas se efectuó en la modalidad de asamblea, donde participó el SEA Ñuble y la comunidad. El martes 16 de abril, se desarrolló una reunión informativa en la sede social de la Villa Olimpo ubicada en pasaje Adonis #412, Chillán”.
“La segunda y tercera actividad se realizó en la modalidad Casa Abierta, y en ella participaron el equipo del titular del proyecto, el SEA y la comunidad. Dichos encuentros se efectuaron los días 18 y 23 de abril pasado, también en la sede social de la Villa Olimpo”, detallaron.
Además, indican que el 14 de mayo “se publicó el Anexo de Participación Ciudadana que contiene las observaciones recibidas de la comunidad, las que fueron emitidas al titular para ser incorporadas en sus respuestas dentro del proceso de evaluación del proyecto”.
La voz de los vecinos
Según la propia comunidad residente en la zona, se ha hecho un buen trabajo, hasta el momento, en materia de difusión y participación ciudadana. Eso sí, indican que hay ciertas discrepancias con algunas Seremis, por no haber formulado ninguna observación al proyecto, en especial la de Transportes y Telecomunicaciones.
Johana Ulloa, vocera de la organización Camino Parque Lantaño, expresó que todas las observaciones indicadas deben ser subsanadas por la constructora.
“Nosotros hicimos ruido también, ¿porque cómo va a ser que la Seremi de Transportes no mostrara indicaciones sobre algo que nos iba a provocar a nosotros una congestión vial horrible? Pero hubo otras que sí tuvieron observaciones y deben ser subsanadas”, precisó.
Indicó que “nosotros no podemos detener la construcción de estas torres, pero sí podemos aplazarlas. Haciendo un poco de ruido, yendo a los lugares que corresponden. Ahí pudimos llegar al Ministerio de Transportes, en Santiago, esto fue el lunes 6. Fuimos para allá, tuve un encuentro con el ministro y le conté todo lo que estaba pasando”.
Añade que si bien, no se oponen al proyecto, quieren resolver el tema de las mitigaciones, enfocadas en el impacto vial que esto traería.
“Nosotros no nos oponemos a que la gente tenga su vivienda propia, para nada, pero si tenemos que ver el tema de las mitigaciones. Hay que hacer estudios reales de lo que está sucediendo con la congestión vial, que es el mayor problema que nosotros tenemos en este minuto. En base a eso, pudimos ingresar a la participación ciudadana justo a tiempo durante abril”, sostiene la vocera.
Explica además que, por parte de la Municipalidad, se hizo un recurso de amparo para que se realizaran “todas las mitigaciones”.
“Estas son referentes al impacto que esto provocará, tanto en la parte social, medioambiental o vial. Porque supongamos que podrían ser más de 1.000 autos más que van a estar. Entonces mientras se busca una alternativa de entrada y salida para el proyecto, este estará detenido”, precisa.
Las entidades que no se pronunciaron respecto al proyecto ingresado al SEA, fueron la Corporación Nacional de Desarrollo Industrial, Seremi de Bienes Nacionales, Desarrollo Social y Familia, Energía y Transporte y Telecomunicaciones.
Llegada de residentes
Otro tema no menor se relaciona con la futura llegada de personas a estos edificios residenciales, provenientes del subsidio DS 19. Este programa es destinado específicamente a familias de diferentes realidades económicas, por lo que es un subsidio de integración social.
En este punto, la labor del Servicio de Vivienda y Urbanización (Serviu) corre un papel clave en la socialización entre las familias que comenzarán a vivir en estos sectores. Desde la entidad indicaron que estos programas son de integración social y territorial, donde se integran subsidios del sector más vulnerable, junto con otros donde se aplica un crédito hipotecario.
El director de Serviu Ñuble, Roberto Grandón, explicó que se hace un plan de integración. “Consiste en poder generar instancias de participación y socialización conjunta de los dos grupos, que van a ir a vivir y a convivir en una comunidad”.
Añade que “el trabajo que se desarrolla y supervigila Serviu, convoca a las familias vulnerables y del sector medio y generan actividades conjuntas. Lo que busca es generar un real proceso de integración, que es el sentido del decreto DS 19”.
El director indica que, por lo general, no se generan instancias conflictivas, ni en la comunidad que llega, ni con los vecinos que ya residen en los sectores colindantes.
“A veces dichas familias tienen preocupación, pero por lo general no hay ningún conflicto. El objetivo del DS 19 es generar instancias de socialización, el sector vulnerable no tiene porque irse a vivir a la periferia. Pero se logra cumplir finalmente con este plan de integración entre todas las comunidades”, concluye Grandón.
