Share This Article
En el año 1973 el Consejo Universitario decidió, a sugerencia del área de Ciencias Agropecuarias, trasladar a Chillán la carrera de Medicina Veterinaria nacida en el año anterior en el campus Concepción. Esta medida tenía como objetivo la configuración de un Campus Agropecuario en Ñuble por su evidente entorno agrícola, lo que se enmarcó en el Plan Chillán.
El director del Campus Chillán en aquella época, Luis del Villar Zarco, jugó un rol importante en la llegada de la carrera el año 1974. De hecho, las clases se iniciaron el 24 de marzo de ese año junto a las clases de la carrera de Agronomía. De ahí en más, los logros alcanzados han sido trascendentales no solo a nivel local, sino que nacional e incluso internacional.
Durante la ceremonia, a la que asistieron diversas autoridades, el Dr. Patricio Rojas, decano de la Facultad, puso en relieve los desafíos pendientes. “Los retos actuales están asociados al cambio cultural y social, cambio climático y como médicos veterinarios hemos podido tributar a todos esos aspectos y debemos continuar haciéndolo desde nuestras áreas disciplinarias y formando profesionales íntegros y capaces de enfrentar los nuevos desafíos. Por lo mismo estamos haciendo en estos momentos una modificación curricular, lo que significa mejorar el plan de estudios con nuevos conocimientos relacionados por ejemplo con la inteligencia artificial y mejorando también la infraestructura con el apoyo de rectoría, y estamos en un proceso de licitación para la ampliación del hospital clínico veterinario para fortalecer por un lado la formación de pregrado y postgrado, pero también para poder ofrecer especialidades, y en el tema del Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre (CRFS), queremos gestionar un nuevo centro en el futuro, porque es un área primordial para la biodiversidad y la preservación de las especies silvestres”.
Justamente sobre el CRFS-UdeC, la Dra. Paula Gallegos destacó el trabajo realizado en los comienzos del Centro de Rehabilitación de Fauna Silvestre, junto a su colega Ignacia Najle. “Fue una gran parte de mi vida la que hice en este centro de rehabilitación, lo que me ha permitido también desempeñarme en otras áreas, porque en sus comienzos implicó un trabajo multidisciplinario, para poder hacer que todo funcionara y me generó el gran amor que tengo hacia la fauna silvestre y el medio ambiente. Lo importante es seguir invirtiendo en su cuidado, porque preservando el medio ambiente nos preservamos todos nosotros también”.
Por su parte, la Dra. Paula Aravena, se refirió a la proyección de la rehabilitación en Chile. “Hay grandes expectativas respecto de lo que se puede hacer y de cuánto podemos avanzar para que la rehabilitación de fauna silvestre sea realmente una estrategia de conservación nacional e incluso internacional, ya que nosotros apuntamos a ser un pilar fundamental en la conservación Latinoamericana y de respuesta a emergencias ambientales. Vivimos en una zona muy compleja, donde es muy común que ocurran incendios forestales, inundaciones o terremotos, por lo tanto siempre vamos a estar con un nivel de riesgo alto para nuestra fauna también, por eso para nosotros es clave poder trabajar siempre pensando en hacerlo más allá de lo local y de manera colaborativa y para ello estamos preparando a nuestros estudiantes para generar este capital humano avanzado”, explicó la Dra. Aravena, quien también destacó la serie de capacitaciones que realizan durante el año a los primeros respondedores, estudiantes y particulares en general que pueden encontrarse con fauna silvestre eventualmente y no sabe cómo proceder para poder dirigirla hacia la rehabilitación exitosa.
Durante la jornada también se destacó y reconoció como un hito de la historia de la carrera de Medicina Veterinaria de la UdeC el trabajo desarrollado por la Dra. Lleretny Rodríguez Álvarez, quien junto a un equipo de investigadores lograron concretar el nacimiento de Victoria, la primera ternera clonada en Chile. La Dra. Lleretny hizo un recorrido sobre la historia del trabajo en clonación que se ha realizado en los últimos 20 años en el Campus. “Luego de Victoria, vino Esperanza, Julieta y Romeo y han sido momentos de orgullo y felicidad en nuestras vidas, pero hoy en día nuestro laboratorio ya no es ese que nosotros conocimos, es uno de los mejores del país en biotecnología animal, donde recibimos a estudiantes e investigadores de todo el mundo y donde contamos con tecnología de punta donde desarrollamos líneas investigativas de primer nivel”.
La jornada culminó con el reconocimiento a los Profesores Eméritos de la Facultad, Sergio Recabarren, Rubén Pérez y Armando Islas, además de ex encargados del CRFS-UdeC.
El seremi de Agricultura de Ñuble, Antonio Arriagada, invitado a la ceremonia, destacó el rol de Veterinaria UdeC en el desarrollo agropecuario de la región. “Hoy ya es una Facultad consolidada que ha sido un pilar fundamental no solo para Ñuble, sino que para el país y que logrado incluso destacar en el extranjero gracias a sus importantes líneas investigativas en la medicina veterinaria”.