Llegó el 2019 con hambre de gloria, jugó una liguilla, por el ascenso en la B, se marchó a Coquimbo Unido para jugar en Primera, pero retornó a Chillán tras no explotar en el cuadro “pirata” y perder a su querido hermano.
En la capital de Ñuble volvió a ser “feliz” y se transformó en pieza clave en el ascenso a Primera de Ñublense, pero este 2021, tras un arranque prometedor, una pubalgia lo sacó de circulación hasta decir adiós.
La historia del delantero Mathías Pinto Mell con Ñublense ha sido un carrusel de emociones. De altos y bajos, de logros y tropiezos que hoy llegan a su fin, luego que el atacante formado en la Universidad de Chile, confirmara que no sigue en la tienda chillaneja y la razón de su exclusión de los últimos partidos del elenco de Jaime García.
“Como te dijeron de la dirigencia, no sigo, termino contrato. A comienzo de año me ofrecieron un contrato por dos años, pero no acepté las condiciones porque lo encontré muy bajo y no he jugado porque fui muy sincero con el profesor, ya que le estaba haciendo un mal al equipo y a mí. Esto porque físicamente no estaba muy bien y todavía me molestaba la pubalgia, así que opté por dar un paso al costado y recuperarme totalmente. Hace dos semanas estoy haciendo físico por fuera y solo dejé de jugar para no hacerle daño al club y a mis compañeros”, confiesa “Pintogol”, quien marcó tres goles esta temporada.
Relación con la dirigencia
Consultado sobre si existe la opción de que pueda renovar su contrato, el ariete formado en la Universidad de Chile, reveló la causa por la que esa opción está casi descartada.
“Pensé que me iba a sentir bien tras la lesión, al principio no me dio, me costó mucho volver, estuve dos meses parado, fue difícil volver. Me quedaba entrenando solo físicamente, pero no me dio y di un paso al costado. No he hablado con el profesor nuevamente, pero está difícil seguir, ya que la cosa adentro no está muy buena con los dirigentes y veo muy difícil quedarme nuevamente allá”, revela el extremo por derecha que se va agradecido del hincha de Chillán. “Me di cuenta que es una lesión difícil, me costó asimilarlo. Solo queda ir hacia adelante y lo que Dios quiera. Gracias por el cariño que siempre me entregaron. Me siento uno más de Ñublense, de Chillán, tengo los mejores recuerdos de la ciudad, el equipo y de su gente”, sentenció el goleador, que buscará un nuevo destino.
El plantel y cuerpo técnico se sometieron este jueves a nuevos test PCR, tras finalizar la cuarentena indicada luego que la semana pasada se confirmara un caso positivo de Covid-19. Hoy retoman los entrenamientos en Paso Alejo.