Fue con motivo de la reciente conmemoración del Día de la Actividad Física, el 6 de abril, donde salieron a relucir las preocupantes cifras de malnutrición entre los niños y niñas de Ñuble. Más del 57% de quienes tienen entre 6 y 9 años que se controlan en los centros de salud de la región, presentan sobrepeso u obesidad.
“Sabemos que uno de los factores más dañinos para la salud en la actualidad es el sedentarismo, estando directamente relacionado con los altos indicadores de obesidad y sobrepeso que están afectando a un gran porcentaje de niños y niñas de la Región. De acuerdo con nuestras estadísticas, tenemos una prevalencia del 40,5% de malnutrición por exceso en las y los usuarios de nuestra Red Asistencial mejores de 6 años, cifra que se asciende a un 57,8% en las personas entre 6 y 9 años de edad”, destacó la Directora (s) del Servicio de Salud Ñuble (SSÑ), Elizabeth Abarca Triviño.
La directiva además recalcó que “estas cifras negativas, nos instan a reforzar el llamado desde nuestra institución a promover la práctica deportiva, así como los hábitos saludables desde la primera infancia. La invitación es a informarse de las iniciativas que se realizan a través de los establecimientos de salud del territorio, las cuales buscan revertir este problema de salud pública”.
La importancia de practicar actividad física de manera regular y sistemática para mejorar la salud y adquirir buenos hábitos de vida, se torna fundamental.
En esa línea, el cardiólogo y Subdirector de Gestión Asistencial del SSÑ, Dr. Max Besser Valenzuela, enfatizó que “junto con la alimentación saludable, realizar ejercicio reduce progresivamente los niveles de malnutrición por exceso y permite contar con una mejor calidad de vida, mayor sensación de bienestar general, e incluso beneficios como mejorar la capacidad cognitiva, ya que éste induce cambios estructurales y funcionales el cerebro”.
Prestaciones en la Red Asistencial
La red de atención primaria implementa múltiples estrategias que tienen por objetivo, reducir los malos índices presentados por la ciudadanía, dando especial enfoque en los niños y niñas, entendiendo que es un grupo etario cuyos hábitos son más moldeables que los adultos, permitiendo generar cambios en sus estilos de vida.
“Por ello, en la red pública de salud, se realiza el control niño sano, que contempla la medición del estado nutricional; y se cuenta con el Programa Vida Sana, que busca reducir en las personas los factores de riesgo de desarrollar Diabetes Tipo 2 e hipertensión arterial, patologías que son factores de riesgo para desarrollar enfermedades cardiovasculares. Una de sus principales ventajas, es que se interviene tempranamente; a partir de los 2 años, facilitando la adopción de estilos de saludables en las y los niños”, afirmó Vanessa Ortiz Vildósola, Nutricionista de la Dirección de Atención Primaria (DAP).
Pueden acceder al programa Vida Sana los usuarios inscritos en Fonasa desde los 6 meses a los 64 años de edad, con diagnóstico de sobre peso y obesidad, por lo que para mayor información se recomienda consultar en su respectivo Cesfam.
