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Destacando los ejemplos de la Universidad de Concepción y de Marina del Sol Chillán, el gobierno celebró la entrada en vigencia de la Ley de 40 horas, que, en su proceso de implementación gradual, considera desde ayer la reducción de la jornada desde 45 a 44 horas semanales. Precisamente, en Marina del Sol, el delegado presidencial, Anwar Farrán, y el seremi del Trabajo, Eduardo Riquelme, destacaron los beneficios de la ley.
Riquelme precisó que en Ñuble son más de 131 mil trabajadores los beneficiados y subrayó que esta reducción no puede afectar o disminuir sus remuneraciones.
“Con una hora más de descanso se me ha facilitado la vida familiar e incluso el pensar en tener hijos”, aseguró Giovanni Cea, trabajador de la empresa Marina del Sol Chillán, que desde enero de este año aplicó la jornada de 40 horas semanales a sus 300 trabajadores.
Julio Trujillo, gerente general de Marina del Sol, explicó que “es obvio que la calidad del trabajo tiene que ver con la productividad y no con la cantidad de horas que la gente está presencial”. Agregó que “la calidad de vida de nuestro personal redunda en la calidad de la atención que ofrecemos a nuestros clientes. Por eso, para nosotros, la implementación de las 40 horas fue fundamental y no esperamos la gradualidad y lo hicimos de una vez”.
En tanto, el delegado presidencial regional enfatizó que “este cambio viene a satisfacer una aspiración histórica y permitirá una mejor calidad de vida y bienestar para los trabajadores y sus familias”.
Por su parte, el director general del Campus Chillán de la UdeC, Dr. Pedro Rojas, explicó que se optó por reducir directamente las 40 horas para el 98% de sus 2 mil trabajadores. “Esto no es casual y viene desde el estallido social, donde se estableció una mesa de trabajo que señaló la necesidad de reducción de la jornada”. Agregó que la nueva forma de trabajo se ha traducido en que las personas “tienen más tiempo para las actividades de la vida privada, con turnos más amigables, por lo tanto, todo apunta a la conciliación del trabajo y la vida familiar y por esa razón fue muy bien recibido por toda la comunidad universitaria”.
El seremi del Trabajo felicitó la anticipación por la que han optado decenas de empresas ñublensinas, aunque precisó que la ley considera que la gradualidad continúa en abril de 2026, cuando se alcanzarán las 42 horas. En abril de 2028, entrará plenamente en régimen, cuando se implementen las 40 horas.
“Los buenos ejemplos nos permiten invitar con seguridad a los empleadores de la región a seguirlos, acordar la reducción horaria con sus trabajadores y solicitar el Sello 40 Horas al Ministerio”, añadió.
Adaptación
Desde la Cámara de Comercio, en tanto, su presidente, Alejandro Lama, explicó que la adaptación de las jornadas comenzó mucho tiempo atrás en numerosas empresas de la región y valoró la reducción que han logrado adelantándose a la ley.
Asimismo, reconoció que en numerosos casos ya se hicieron las modificaciones de contrato para rebajar una hora, según exige la ley, “donde ha primado el acuerdo de las partes, estableciéndose una reducción de la jornada diaria, o bien, de una hora en un día específico”.
“Para el sector del comercio en general, no ha sido muy difícil, ya que desde el estallido social se acortó el horario de atención de público, sin embargo, en aquellas plantas productivas que operan las 24 horas se ha hecho un poco más complicado”, resumió el dirigente gremial.
