La obesidad infantil ha presentado un ascenso durante los últimos años en Ñuble, con cifras que preocupan, considerando que el 40,82% de los niñas y niños menores de 6 años, que están en control en un centro de salud, presentan exceso de peso.
Considerando que durante la época estival algunos de los hábitos pueden sufrir modificaciones, a propósito de las vacaciones escolares, profesionales del Servicio de Salud Ñuble hicieron un llamado para mantener los estilos de vida saludable y así disfrutar de esta época tan anhelada por las y los estudiantes.
“Los malos hábitos alimenticios y el sedentarismo son los principales causantes que la tasa de sobrepeso y obesidad vayan en aumento. Por ello, es que como institución nos preocupamos y llevamos a cabo diversas acciones que tienen por objetivo advertir casos y mejorar la salud de quienes son controlados en nuestra Red Asistencial, principalmente la población más joven”, destacó la Directora (s) del Servicio de Salud Ñuble (SSÑ), Elizabeth Abarca Triviño.
La directiva además recalcó que, “si bien durante las vacaciones la idea es relajarnos y disfrutar, es importante considerar que podemos tener en cuenta algunas recomendaciones para cuidar, sobre todo, la salud de las y los niños. Por ejemplo, es aconsejable llevar siempre una botella de agua; si vas a la playa o piscina podemos llevar colaciones saludables como fruta o frutos secos sin sal y tratar de hacerlo, después del desayuno o almuerzo, para así evitar picoteos extra. La idea es pasarlo bien y descansar, pero sin descuidar nuestra salud”.
Consejos para un verano más saludable
Ximena Osorio Garrido, Nutricionista, Encargada del Programa Vida Sana del SSÑ, indicó que, junto con los controles del estado nutricional de los niños y niñas, es fundamental tener estilos de vida que favorezcan mejorar la salud. “Es importante que los niños, niñas y adolescentes, adopten rutinas más saludables, principalmente en época de vacaciones. Para ello, es relevante que mantengan una hidratación adecuada, favoreciendo el consumo de agua; respeten las horas de sueño; prefieran frutas y verduras de estación; disminuyan las horas frente a una pantalla; realicen paseos en familia al aire libre o ayuden a ordenar dentro del hogar, evitando tiempos sedentarios”, reforzó.
La profesional además enfatizó que “muchas veces, los niños y niñas, al llegar de paseos a la piscina o la playa, llegan con hambre o la sensación de hambre. En esos casos es importante priorizar la hidratación y que la alimentación sea lo más sana posible, evitando dulces, embutidos y frituras, y priorizando lácteos, frutas y verduras”.
Para tener un verano seguro y evitar las complicaciones de salud a futuro, es importante seguir estas recomendaciones, considerando además que el horario de las comidas se ajuste a las actividades familiares, por lo que es normal que durante las vacaciones se vea alterado. Lo importante es mantener un mínimo de tres comidas al día, desayuno, almuerzo y cena, y una colación a media tarde.