Señor Director:
Mahatma Gandhi relevó el concepto de la no Violencia y en el mes de su nacimiento se invita a reflexionar a partir de su legado. Su bandera de lucha fue la No Violencia, materializada en la búsqueda de la verdad y rebelión contra la injusticia. Comprende una actitud interior que no permite ocasionar daño a nivel físico, emocional o mental a ningún ser humano ni ser vivo, en ninguna circunstancia. Actualmente la No Violencia es entendida como un principio de resistencia pacífica, que no significa ser pasivo, sino que rechazar el uso de la violencia en cualquiera de sus formas. ¿Es posible o necesario llevar estos postulados a nuestra vida cotidiana? Vivimos en una sociedad competitiva con énfasis en el éxito, en la belleza y en la popularidad; que nos limita expresar las emociones o mostrar signos de debilidad. Es así como parece que la violencia es una tónica en nuestro día a día y la vemos emerger en la calle, en el transporte, en nuestro entorno y muy intensamente en las redes sociales. Nos hemos tornado desconfiados y menos tolerantes con quien piensa distinto. Nuestro país ha reflexionado recientemente en su historia respecto a la desigualdad, qué duda cabe, habiendo experimentado dolorosamente la pandemia: aún tenemos un aprendizaje pendiente respecto a cómo nos proyectamos como sociedad y de qué manera hacemos parte en ella a todos.
Paula Espinoza Paredes
Académica de la UNAB