Lisette Carrasco irrumpe en el fútbol amateur chillanejo
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El fútbol femenino sigue creciendo a pasos agigantados a nivel mundial, y obviamente nacional.
La clasificación de la selección liderada por Christianne Endler al Mundial de Francia despertó el interés y poco a poco la cancha se está emparejando.
Sin embargo, desde hace años existe esta pasión por el fútbol femenino, y en la Región de Ñuble, no ha sido la excepción, principalmente a través de la Liga Renacer de Fútbol Femenino.
Una de sus principales referentes es Lisette Carrasco, quien defiende la camiseta de Lucero Femenino, y cuenta su historia ligada al fútbol que la llevó incluso a conocer a Marta Tejedor, y ahora a dirigir la serie honor de Lucero en varones.
“Desde pequeña me crié en un barrio donde la mayoría de los niños eran varones,entonces si quería jugar tenía que ser con ellos o no podía jugar. Ahí comencé a jugar fútbol. Cuando estaba en 2º medio me integré a la Liga Renacer y ese año fui elegida la mejor jugadora provincial, a mis 16 años. Luego, llegué a la selección regional en Concepción y jugamos un Nacional. Hasta el día de hoy no he parado de jugar en la Liga Renacer. Tuve un paso por Ñublense y también invitaciones de otros clubes, pero por el tema de distancias y financiamiento se complicó, por lo que decidí quedarme en Chillán a terminar mi carrera”, relata Lissete sobre lo que fue el origen de su pasión por el fútbol.
Con pasos por Ñublense, llegó a formar parte de una preselección chilena, donde conoció a una de las entrenadoras que fomentó el desarrollo del fútbol femenino en Chile, la española Marta Tejedor.
“En Ñublense fueron tres años, luego quedé embarazada y no pude continuar jugando. Fui a un llamado de Marta Tejedor en el 2007, donde llegamos 2 mil jugadoras. Fuimos con algunas compañeras de Chillán, y tras seis días de pruebas, quedamos finalmente 6 jugadoras. Teníamos que quedarnos en Santiago y yo me tuve que volver por mi Universidad, porque no tenía ninguna garantía en mis estudios, comenta Lisette, sobre su paso por la Roja.
Su talento como jugadora lo traspasó fuera de la cancha, y lo llevó a la dirección técnica, donde Lucero fue el club que le abrió las puertas.
“Me integré a Lucero Femenino el 2006, posterior a esto me fui a vivir a la Población Luis Cruz Martínez y de a poco empecé a llegar al club y a trabajar con los niños hasta que se me pidió ayudar en una serie. Estuve todo el año dirigiendo a la serie Sub 16 de Lucero. Al año siguiente apareció Alberto Hernández que me dijo que quería asumir la serie Honor, pero necesitaba mi apoyo. Fue un desafío grande trabajar en la serie más importante del club. Hemos logrado bastante cosas y dentro del plantel hay mucho respeto porque los jugadores son muy buenas personas. Me ha tocado dirigir sola y no hay ningún problema con mis determinaciones, con mis cambios, pueden tener diferencias, pero nunca expresadas de mala manera”, indica la actual integrante del cuerpo técnico de la serie Honor de Lucero.
Sobre el desarrollo del fútbol femenino en el fútbol amateur chillanejo, Lisette Carrasco sostiene que “en Chillán hay muchas mujeres que saben de fútbol. Cuando uno es capaz de demostrar que si sabe de lo que habla, que sabemos de esquemas, de cambios de juego, de cambios de ritmo, y de fútbol en general, y que los jugadores también entiendan, es cuando a uno le creen. Si soy capaz de que me crean hay que creerse el cuento y ayudar desde donde se pueda, niños, adultos o en mi caso con la Serie Honor. En la Región de Ñuble tenemos talento, hay mujeres que son técnicos profesionales de fútbol y trabajan con niños en escuelas de fútbol de la zona. El fútbol amateur es un buen salto para llegar a clubes profesionales”.