El próximo martes se espera que la sala de la Cámara de Diputados ponga en tabla la votación, en tercer trámite, del proyecto de ley de reforma constitucional que limita la reelección de autoridades.
La iniciativa, que tuvo un polémico paso por el Senado, no alcanzó el quórum necesario en la Cámara Alta para aprobar la norma que explicitaba la retroactividad para los actuales parlamentarios, es decir, la imposibilidad de repostular para aquellos diputados que ya llevan tres períodos y para los senadores que cumplen dos.
Esto generó cuestionamientos, ya que la norma recién podría hacerse efectiva a partir de 2033.
Sin embargo, varios senadores y expertos en derecho han advertido que la denominada “retroactividad” -que fue desestimada por falta de quórum en el Senado- estaría de todas formas contenida en la reforma constitucional despachada por esa corporación, y que también incluiría a alcaldes y concejales actuales, que en la norma rechazada habían sido exceptuados.
El senador de la DC, Francisco Huenchumilla, aclaró que si se aprueba la reforma en la Cámara tal como salió del Senado, y un parlamentario se presenta a la reelección con el límite de sus períodos cumplido, lo más probable es que va a ser objetado. En cambio, si se rechaza, obligaría a conformar una comisión mixta para zanjar el tema.
Esto, debido a que al tratarse de una norma de derecho público, regiría “in actum” para los parlamentarios en ejercicio, impidiéndoles repostularse en caso que ya hayan cumplido tres periodos, los diputados; y dos, los senadores.
Será entonces en la sala de la Cámara de Diputados, dónde se decida el futuro de la norma.
Loreto Carvajal (PPD)
“Es sumamente necesario avanzar en el proyecto del límite a la reelección. Había un proyecto en la Cámara de Diputados que durante seis años no avanzó en el Senado, la reelección indefinida no puede sostenerse en una democracia donde queremos que haya nuevos liderazgos, sobre todo, de mujeres. Sin perjuicio de lo que se ha dicho sobre la retroactividad, que es un tema más bien jurídico, debemos dar la señal y limitar los períodos para todas las autoridades. El recambio es necesario, abre espacios de participación y hace posible que la democracia se viva con mayor representatividad. Todos aquellos que adhirieron a la retroactividad deben estar disponibles voluntariamiente a no estar más de dos o tres períodos, según el cargo”.
Frank Sauerbaum (RN)
“El límite a la reelección es una norma no sólo esperada por la ciudadanía, con el fin de oxigenar la política, sino que fundamental para perfeccionar nuestra democracia representativa. Siento también que el efecto retroactivo es necesario, pues de lo contrario, se entiende como una trampa de quienes hoy ostentamos cargos de representación popular. No es explicable ante la opinión pública eso de que ‘estoy de acuerdo con el límite, pero no se empieza a aplicar desde ahora’. Dicha postura solo contribuye a aumentar el desprestigio del Congreso. Sin embargo, en el caso de alcaldes y concejales, no debe aplicarse en abril, debido a que el proceso electoral ya se inició y generaría injusticias, por ejemplo, en la definición de candidatos, o en la igualdad ante la ley para poder competir entre unos y otros”.
Jorge Sabag (DC)
“Este proyecto lo presentamos diputados DC el 2011, fue aprobado por la Cámara el 2012, y después de 8 años se vota en el Senado. Eso simplemente demuestra que no es algo apresurado, ni mucho menos por conveniencia o revanchismo; como algunos injustamente lo calificaron. Es algo que la ciudadanía nos pide a gritos, y lamentablemente, algunos no quieren que rija ahora, sino que en 16 años más. Ahora, más encima nos damos cuenta que lo que había advertido el senador Huenchumilla en el debate, respecto que no ha existido nunca una norma con efecto retroactivo, viene a cambiar todo el panorama. En lo personal, dada la prontitud de las próximas elecciones municipales, creo que no es bueno imponerle la retroactividad a alcaldes y concejales en 2021, sino en el próximo período”.
Gustavo Sanhueza (UDI)
“Creo en la libertad de las personas para decidir y en la democracia participativa. No existe mejor control social que la ciudadanía decida cada 4 años quién recoge de mejor forma sus ideas o necesidades; quién debe salir del sistema político, o quién debe entrar. Y no hay mejor evidencia que la propia Cámara de Diputados, donde la renovación después de cada período es de entre un 30% y un 40%. Pienso que la mirada debe estar puesta en mejorar la calidad de la política, en fortalecer los partidos, en hacer reformas para que el Congreso sea más eficiente en su tramitación legislativa, y revisar, probablemente, la extensión del período para los senadores, porque 8 años se percibe como largo, y además, restringe la posibilidad de que la ciudadanía evalúe la gestión en un plazo más acotado”.
Carlos Abel Jarpa (Independiente)
“Lo expresé en mi votación de 2012, en la cual consideramos que las autoridades no deben eternizarse en sus cargos, y lo ratifiqué en octubre del año pasado, cuando señalé que por coherencia, no sería candidato a diputado en 2021, dado que habrían transcurrido los 3 períodos desde aquella votación. Esto lo ratificamos nuevamente por medio de una carta, antes que este proyecto fuera tramitado en el Senado, después de haber transcurrido 8 años. Lo que se crea son nuevos requisitos e inhabilidades para quienes han estado ejerciendo ciertos períodos en sus cargos, y eso debe regir para todos quienes actualmente cumplimos algún cargo de elección popular. En ese sentido, no deben existir diferencias con los alcaldes y concejales, dado que lo que busca esta iniciativa es precisamente la renovación de actores políticos”.