Señor Director:
La autoeficacia es la confianza que las personas tienen acerca de sus capacidades. En un contexto de género, este concepto se refiere a la confianza que tienen las mujeres para lograr lo que se proponen. En el mundo del emprendimiento esto es determinante.
Una forma simple de fomentar la autoeficacia es a través de modelos a seguir. De conocer a personas similares, que compartan ciertas características -como que tengan una edad parecida, sean de la misma localidad- y que puedan ser referentes.
Karen Angulo tiene un negocio de joyas en Antofagasta y fue una de las ganadoras de la primera versión del programa Despega Mujer de Fundación Luksic. Tras pasar por dicho programa -a través del cual recibió $2 millones de pesos, mentorías personalizadas, capacitaciones y participó de círculos de aprendizaje con otras emprendedoras-, se formalizó, aumentó sus ventas en un 100%, pasó de vender $2.000.000 de pesos mensuales a $5.000.000 de pesos mensuales, tiene a cuatro personas contratadas y hoy incluso está analizando la posibilidad de abrir un segundo local.
Así como Karen, conocemos de cerca también los testimonios de Liliana Núñez de Valparaíso o Luisa Pino en Ñuble y casi 200 historias más de mujeres que han pasado por el programa y que con perseverancia, dedicación y trabajo han hecho despegar sus negocios y sus sueños.
Este 19 de noviembre se celebra el Día Mundial de la Mujer Emprendedora y creemos que es fundamental aplaudir y valorar públicamente el trabajo que tantas mujeres realizan en nuestro país. Es importante que sus historias, sus visiones y sus voces tengan un espacio, que se den a conocer. Ellas pueden inspirar a otras mujeres para que crean que pueden ser las protagonistas de sus vidas, que es posible cumplir los sueños.
Cristián Schalper Sepúlveda