Dos listas de ciudadanos independientes buscarán a nivel local cupos en la convención constitucional mandatada para escribir la nueva Constitución de nuestro país.
Un desafío no menor frente a la “máquina” de los partidos políticos y el sistema electoral proporcional, que los obliga a sumar muchos votos para poder elegir a uno de sus miembros el próximo 11 de abril, y en la previa, para ser candidatos, reunir, en el caso del distrito 19, 1.083 patrocinios como lista, cantidad que superaron con creces, promediando las 4 mil firmas.
Independientes por una Nueva Constitución
Siguiendo el orden de la papeleta, la primera de las listas es Ciudadanos Independientes de Ñuble por una Nueva Constitución, surgida al alero de la organización Independientes No Neutrales.
Según sus propias palabras, representan al ciudadano común y corriente, que cansado(a) con las prácticas de la clase política, “que nos han llevado a un descrédito del ejercicio de la política como bien común y el cuidado entre todos(as); buscamos un involucramiento directo en la toma de decisiones”.
Sus integrantes dicen haber visto no sólo el despertar de la ciudadanía desde el 18 de octubre de 2019, sino también, producto de la pandemia, “un Estado ausente, que no protege, no cuida y no busca el bienestar de la población, sino que mantiene las grotescas desigualdades socioeconómicas, que se manifiestan en todo orden de cosas, desde el costo de la vida, la diferencia de salarios, el acceso a la calidad en salud, vivienda, educación o los mismos servicios básicos como el agua, la electricidad, entre otros, que tiene su origen en la ideología de la privatización que ha permeado todas las esferas de relación entre nosotros(as)”, sostienen.
Según los integrantes de Independientes por una Nueva Constitución, el sistema estructuralmente ha tocado fondo para la gran mayoría de los chilenos, representados en ese 80% a nivel nacional (73% a nivel regional) que se manifestó por el Apruebo y la convención constitucional (no mixta). “Esto marcó un precedente democrático, y no queremos que los mismos de siempre sigan usufructuando de sus redes de poder, con financiamiento irregular o poco sentido ético de sus campañas o redes serviles, como el clientelismo, que no permite a todos ver que hay otros caminos para la vida política, sentenciando a miles de ciudadanos a seguir liderazgos foráneos o con conflictos de interés públicos”, sostienen.
Para estos aspirantes a la Constituyente, por ejemplo, “los liderazgos como Harboe o Arrau, no buscan, a nuestro juicio, representar las demandas ciudadanas, sino mantener un statu quo, obedeciendo a sus estructuras partidarias o ideológicas, donde aparezcan cambiando todo, subiéndose al carro del discurso social, pero en los hechos y fondo, manteniendo intacto el modelo heredado de la dictadura cívico militar, que para algunos, ha sido muy provechoso”, advierten.
En la práctica, agregan, “esta opción se traduce en una profunda revisión y cambio del modelo neoliberal, apostamos por la presencia de un Estado social que sea no solo garante, sino también activo partícipe de la redistribución de la riqueza y el aseguramiento de un bienestar para todos los chilenos(as). Apelamos a la justicia y el derecho como base, expresados en una eficiente regionalización y autonomía de los territorios para buscar las mejores y más efectivas soluciones a sus miembros, con un enfoque integral de respeto al medio ambiente y conciencia eco social, donde sistémicamente nos relacionamos entre personas, medios naturales, sociales y su impacto en la vida integral de un país. Queremos un Estado más eficiente, que sea capaz de resolver conflictos sociales sobre la base del derecho y la participación efectiva de los ciudadanos, erradicando la represión de la protesta social y reformando profundamente el ejercicio de la fuerza, dando cauce a las diversas cosmovisiones, opciones, creencias, y que promueva el desarrollo integral de todos(as), haciendo un reconocimiento para nuestros pueblos originarios, la diversidad en todas sus formas, y la interacción como acción de involucramiento en lo político, como un factor clave de acción permanente”.
También abogan por un sistema de gobierno que no perpetúe un presidencialismo extremo como el actual, “queremos mayor poder de fiscalización de todos los poderes del Estado, las autoridades y funcionarios públicos y la rendición de cuentas con total transparencia y acceso a la información. Nuestra propuesta es abarcar al habitante de Ñuble con gente cercana, preparada en sus áreas de estudio y desarrollo personal y profesional, con un sentido ético de ser y hacer en el tiempo, y un compromiso social a toda prueba, pues junto con ser ciudadanos de nuestras comunas de Ñuble, son personas que representan un abanico de sensibilidades en nuestra tierra de Ñuble. Para ello, en unidad con más de cien independientes a nivel nacional, hemos coincidido nuestras propuestas y diálogos por medio de la plataforma virtual https://participanoneutrales.cl/es-CL/ “, manifiestan.
Fuerza Social
Los seis candidatos(as) de la lista Fuerza Social creen firmemente en la democracia, en un Estado de derechos garantizados (salud, vivienda, trabajo digno, previsión, educación, medioambiente, entre otros), y en elevar a rango constitucional el acceso y desarrollo de las artes y la cultura, como herramienta de transformación y bienestar social.
“Queremos poner fin al Estado Subsidiario, es crucial para ello, además de instalar como variable el límite al derecho de propiedad, el rol social y el bien común. Nuestra convicción, es que debe existir en Chile un correcto funcionamiento de las instituciones democráticas; por ello, la aspiración a incorporar en la nueva Constitución mecanismos de democracia directa como plebiscitos en temas políticos sensibles, iniciativas populares de ley y también la opción de, a través de los propios ciudadanos(as), la derogación de leyes que vulneren el interés mayoritario de los ciudadanos”, aseveran.
También es necesario, sostienen, “instaurar el referéndum revocatorio, para así quitar el mandato representativo (antes del fin de su período) a autoridades electas, cuando éstas no cumplan sus promesas, o derechamente, terminen legislando en contra de sus electores y la ciudadanía”.
Fuerza Social también cree en la libertad de las personas, en el Gobierno de las mayorías, en el respeto a las minorías, en la real y directa participación política de la ciudadanía, en la descentralización del poder, en la autonomía de las regiones, en la diversidad cultural, en la tolerancia, en el desarrollo social, en la equidad, en la justicia social, en el crecimiento económico sostenible ambientalmente, en la innovación, en la protección irrestricta de nuestros recursos naturales y el ecosistema en su conjunto.
“Aspiramos a un Estado cuyo rol, además de ser garante de derechos, fuertemente fiscalizador y regulador, sea además ‘productor’ en áreas sensibles de la economía y ámbitos de interés social y bien común, con el objetivo de permitir una vida digna a cada uno de los chilenos(as)”, afirman.
Sus candidatos(as), además, se declaran personas comunes, solidarias, con una profunda vocación de cambio y transformación, “y abrazamos de forma irrestricta, el sueño de construir con todas y todos, con las mayorías y minorías históricamente postergadas, un país moderno y desarrollado, es decir, con igualdad, justicia social y libertad real (no basada ésta, en la capacidad de pago o endeudamiento que se tenga)”.
Como constituyentes, añaden, “buscaremos abrir la discusión y debate en el territorio, en las comunidades y organizaciones (formales e informales); ello a fin de generar cabildos permanentes, lo que se transformará en mandato para el/la o los convencionales electos. Solicitaremos respaldo ciudadano para mantener la movilización de las comunidades y personas del territorio, a fin de continuar la presión necesaria que permita instalar los temas que el país demanda. Abogaremos para que las sesiones de la convención sean abiertas a la comunidad, transparentes y sin trampas, exigiremos su transmisión íntegra por canales estatales de comunicación, en vivo y en directo”, sentencian.