Señor Director:
Es preciso procurar concordar todos en todas las cosas y dar pie al equilibrio entre el cuerpo y el alma buscando la común utilidad, sin ridiculizar ni lamentar ni detestar las acciones humanas sino en entenderlas. Se trata de la utilidad entendida como un tipo de orden que beneficie a la mayor cantidad de seres, un camino sinuoso de gradualidad con desencuentros y aprendizajes.
Todos los seres valen, el ciego no ve igual que la piedra y ambos valen en su ser, hay una igualdad entre las diversas formas de existencia, donde un animal vale igual que un humano y un loco que un cuerdo. Los geólogos conversan con las piedras a través del conocimiento en su naturalidad en reposo “aparente”.
La conciencia no es suficiente porque representa un juicio de valor y moral de los efectos, quien hizo bien o mal, fiscaliza y hace tabla rasa de la causalidad. En esa relación causal está la comprensión y el diálogo común.
El logro de un proyecto común sigue el camino del conocimiento adecuado que permite hacer legitimo un proyecto común. La clave es el arte de componer relaciones o la apuesta por una organización de los encuentros con afecto y alegría.
El deseo o conatus de Spinoza se refiere al esfuerzo que cada ser realiza de acuerdo a sus capacidades, a perdurar, es decir a desear lo que es más útil a su condición natural. Es el derecho natural que nos es común.
El derecho natural según el cual cada uno es su propio juez, cesa institucionalmente en el estado político. Ello, en virtud de la constitución política. Sin embargo, el derecho natural de cada uno, si se piensa bien, persevera. Efectivamente, tanto en el estado natural como en el político, el ser humano actúa según las leyes de su naturaleza y vela por su utilidad.
El estado político tiene duración y cese. El estado natural del ser a pesar de los pesares procura lo común. Es preciso transitar de la utilidad instrumental institucionalizada limitadora del bienestar común hacia una utilidad centrada en la convergencia natural común. Vital para procurar, como lo escribió Alain Touraine: “Si podremos vivir juntos”.
Rafael Galdames Fuentes Sociólogo y Magister en Ciencias Sociales