Una semana plagada de visitas presidenciales vivió Chillán, de cara a la segunda vuelta de gobernadores regionales del próximo domingo, que enfrentará al representante de Unidad Constituyente, Óscar Crisóstomo (PS), y al postulante de Chile Vamos, Jezer Sepúlveda (UDI).
La primera en aterrizar en el territorio fue la presidenta del Senado y posible carta presidencial de la DC, Yasna Provoste, quien al igual que el presidente del Partido Radical y carta a la moneda de dicha colectividad, Carlos Maldonado; y a la ya oficializada candidata del PS, PPD, PL y Nuevo Trato, Paula Narváez, viajaron hasta Ñuble para respaldar la candidatura del ex director provincial del Serviu Ñuble.
Todos ellos se reunieron con Crisóstomo, e hicieron hincapié en la importancia de participar este domingo en un día histórico para las regiones.
Coincidieron, además, en un diagnóstico negativo respecto del actual gobierno, por lo que llamaron a votar por quien, a su juicio, representa cambios de fondo.
Todos tuvieron también una agenda propia en la zona, con militantes y autoridades recientemente electas de sus partidos.
Ayer, en tanto, fue el turno del candidato presidencial de la UDI, el alcalde de Las Condes, Joaquín Lavín, quien si bien le dio su respaldo al postulante de Chile Vamos, Jezer Sepúlveda, desarrolló más bien un agenda propia, con visitas a algunas familias de Chillán, y reuniones con gremios, como el de los funcionarios de la educación municipal. Aprovechó, además, de pasar a ver su padre, quien vive en Portezuelo.
Acusaciones de intervencionismo
Junto con la llegada de candidatos presidenciales, la semana estuvo particularmente “movida” en cuanto a visitas ministeriales.
Primero fue el ministro del Interior, Rodrigo Delgado, quien vino hasta Chillán a encabezar el segundo gabinete social junto a la subdere, 
María Paz Troncoso; el director de la División de Organizaciones Sociales, Jorge Fuentes, además del subsecretario de Gobierno, Emardo Hantelmann. También dio inicio, junto a autoridades locales, a las obras de construcción de la Subcomisaría de Carabineros Huambalí, y puso en marcha el proyecto de televigilancia móvil.
Ayer en tanto, arribó a Ñuble el ministro de Vivienda, Felipe Ward, quien anunció la superación de la meta comprometida de asignación de subsidios habitacionales en 2018 por el Presidente de la República. La meta original para el período 2018-2022 era 5.664 y a la fecha, se han asignado 8.992 subsidios cuantitativos, lo que implica un aumento del 59%.
Fue precisamente esta visita la que generó unas polémicas declaraciones del candidato a gobernador, Jezer Sepúlveda, el día anterior, quien a una radio chillaneja declaró haber sido el gestor directo de la venida del ministro Ward, y haber logrado darle solución a varias agrupaciones habitacionales.
Las declaraciones, sumadas a otro video en el que se ve al seremi de Obras Públicas, Javier Parra, realizando campaña en medio de una actividad oficial, encendieron las alarmas en la oposición, y ayer, extrañamente, Jezer Sepúlveda no estuvo en el punto de prensa que dio Joaquín Lavín.
La senadora del PPD, Loreto Carvajal, cuestionó “el excesivo intervencionismo electoral, del cual hemos sido testigos desde que asumió el gobierno de Piñera. Primero un sectarismo, en donde las autoridades que somos de oposición no somos consideradas, y un abuso constante, sobre todo en estos días en que estamos próximos a una elección de gobernadores. No ha habido ninguna limitante por parte del seremi de Obras Públicas, así como ocurrió con el intendente y con la exgobernadora de Itata, aquí ha habido una falta de respeto hacia la ciudadanía, espero que el ministro de OO.PP. tome medidas”, afirmó.
Consultado el candidato presidencial Joaquín Lavín sobre estas acusaciones -él también fue blanco de críticas al aparecer junto al gobierno promoviendo la postulación al IFE-, manifestó que “lo importante es que los funcionarios cumplamos nuestro rol, y nuestra opinión personal la debemos manifestar en nuestras horas libres, nunca usando recursos públicos. Si eso se cumple, no hay problema, se puede hacer bien el trabajo y tener al mismo tiempo una opinión política”, advirtió.
Acusaciones cruzadas
Culmina así una campaña de gobernadores que en Ñuble, no ha estado exenta de polémicas, con acusaciones cruzadas entre una y otra candidatura, que ha relegado a un segundo plano la discusión de ideas.
Desde el comando de Jezer Sepúlveda han acusado a Óscar Crisóstomo de haber supuestamente utilizado su cargo como delegado provincial del Serviu para intereses personales y otorgamiento de subsidios a familiares; mientras que Crisóstomo denunció la supuesta utilización de bases de datos de servicios públicos para enviar propaganda en su contra, y la negativa constante de su oponente a participar en debates públicos.
