Pese a las campañas oficiales que buscan reforzar la seguridad vial, la cantidad de muertes en accidentes de tránsito sigue aumentando. Chile es uno de los 5 países de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE) con mayor aumento de la mortalidad por accidentes de tránsito. El estudio mide la evolución de la mortalidad por este tipo de eventos durante 15 años. En ese plazo, 30 países disminuyeron hasta en un 50% la ocurrencia de víctimas fatales, mientras que Chile logró un importante descenso después del peak de 2006 (cuando superó las 1900 muertes por año), pero desde 2016 registra un aumento paulatino, situándose por sobre los 1.600 fallecidos cada año como consecuencia de un accidente de tránsito y más de 52 mil víctimas que resultan con secuelas del impacto, que van desde leves y recuperables, a neurológicas y permanentes.
El informe resulta relevante, pues generalmente se conocen las estadísticas de Carabineros y de la Comisión Nacional de Seguridad de Tránsito, Conaset, que contabilizan sólo aquellos decesos ocurridos en el lugar de la tragedia, por lo que son solo parciales. La pesquisa, en este caso, incluye a los centros de Salud y termina aumentando el número de casos fatales en casi 30%.
Paralelamente, se confirma que cada día entre 4 y 5 chilenos pierden la vida a manos de un vehículo motorizado. Es una de las principales causas de mortalidad en Chile, sobre todo entre la población joven de entre 15 y 29 años, siendo la segunda causa de muerte en el país después de los suicidios. Casi la mitad de los fallecidos en accidentes tienen menos de 40 años, y un tercio de quienes pierden la vida son peatones. La cantidad de hombres triplica a la de mujeres, y si bien el 85% de los accidentes ocurre dentro de las ciudades, 6 de cada 10 fallecidos proviene de siniestros en carreteras. Asimismo, es más probable que un accidente que deja fallecidos transcurra durante la noche y madrugada.
Ñuble contribuye en forma importante a esta estadística. En 2021 se produjeron en la región 2.336 siniestros que ocasionaron 63 muertes y 1.609 lesionados, entre graves, menos graves y leves. Las cifras revelan un aumento del 18% en comparación a los ocurridos el 2020 (1.979).
Por otra parte, de acuerdo a estudios entregados por Carabineros, las principales causas de los accidentes de tránsito con resultado de muerte o lesiones graves son conducir a velocidad no razonable ni prudente; la ingesta de alcohol, la desatención en la conducción, en la que se considera hablar por celular o chatear, las acciones o maniobras anexas a la conducción, no ceder los derechos preferentes de paso y, por parte de los peatones, la cruzar por lugares no habilitados.
Por lo general, no se mencionan las discapacidades que dejan los accidentes de tránsito, toda vez que lo que acapara la noticia es el número de muertos que ocasionan, lo cual impide darle la exacta dimensión al problema. Pero este estudio de carácter internacional además da cuenta de las lesiones que incluyen hospitalización con seguimiento de observación, suturas, uso de yesos u ortopedia, y todo otro tipo de asistencia de alta complejidad. En cualquiera de estos casos, las secuelas no solo son físicas, sino también psicológicas y emocionales, tanto para las víctimas como para sus familiares directos.