Señor Director:
Como es sabido, desde el año pasado las y los candidatos a las universidades del sistema de acceso centralizado deben rendir las Pruebas de Acceso a la Educación Superior (PAES). Este cambio ha implicado desafíos como también oportunidades para los colegios y estudiantes, ya que ha habido un cambio de enfoque en términos de evidenciar habilidades más que contenidos y además la posibilidad de que los estudiantes tengan dos momentos de rendición de varias de estas pruebas, con el fin de dosificar su rendimiento y a la vez tener más de una opción de demostrar el mismo, pensando en la selección de los mejores candidatos para cursar estudios superiores.
Sin embargo, los datos manejados hasta el momento, indican que ha habido una baja inscripción en las PAES de invierno que se rinde esta semana, instancia que es la primera de dos oportunidades en el año para que los estudiantes muestren su mejor nivel de aprendizaje posible. Esto es lamentable y complejo, pues impide a la política pública usar los resultados para eventuales decisiones de alcance masivo que se podrían aplicar, especialmente, en términos formativos para la prueba y los procesos de enseñanza y aprendizaje. Sin embargo, el mayor daño es para los mismos estudiantes, ya que por desinterés, falta de información o una mezcla de ambas, desperdician un momento clave para su trayectoria y futuro educativo y para probar su aprendizaje en una prueba nacional que, en el peor de los casos, los resultados podrían utilizarlos formativamente para presentar un mejor desempeño en la rendición de fin de año.
Ante ello, es necesario que haya una campaña comunicativa sobre los beneficios de tener dos instancias de aplicación de esta prueba, lo que honraría a las voces que, por años, solicitaron un ajuste de relevancia en esta evaluación.
Dangelo Luna Muñoz
Académico Facultad de Educación UDD