La construcción del Centro Regional Teletón en Ñuble se convirtió en el primer ejemplo concreto de cómo la delgada línea entre las facultades del gobernador regional y del delegado Presidencial, puede cruzarse, mezclándose competencias y atribuciones.
Sin duda la obra es de interés común, y lo ideal es que se trabaje en conjunto para concretar la mega obra, sin embargo, el interés de cada una de las nuevas autoridades de Ñuble -Óscar Crisóstomo como gobernador y Cristóbal Jardua, como delegado- ha estado puesto en liderar la agenda, lo que es legítimo, sin embargo, confunde a la ciudadanía a la hora de interiorizarse sobre los roles que cumple cada uno de ellos.
Y no solo ha ocurrido con el centro Teletón. Sucedió también con la iniciativa local de albergar un centro de producción de vacunas de Sinovac, para lo cual en un principio el diputado Jorge Sabag llamó al gobernador para actuar en conjunto, y luego apareció el delegado ofreciendo terrenos junto a la seremi de Bienes Nacionales; y con el Museo Regional, iniciativa de la cual tanto Crisóstomo como Jardua han aparecido como artífices, con sendos comunicados a la prensa.
A nivel nacional, el fenómeno se repite. En la Región Metropolitana, el gobernador regional, Claudio Orrego generó la primera polémica con el delegado Presidencial regional, Felipe Guevara, al plantear la necesidad de acortar el toque de queda en el territorio. La respuesta del nivel central fue clara: no es atribución de la nueva autoridad regional referirse al tema.
El legado de los intendentes
Según la politóloga y académica de la Universidad de Concepción, Jeanne Simon, existen varios problemas con la “cohabitación” de gobernadores regionales y delegados Presidenciales.
“Hay poca claridad sobre las atribuciones que corresponden a cada cargo. No observo un cuidado para reconocer y omitir opinar sobre temas que no corresponden al cargo. Claramente es complejo, porque varios delegados presidenciales fueron intendentes, y parece que quieren defender sus decisiones y acciones”, planteó.
Simon agregó que casi todos los gobernadores regionales en el país no son de Chile Vamos.
“Hay una tensión muy relacionada a la baja legitimidad del actual gobierno, por lo que el proceso de instalación será más lento con las y los gobernadores que ejercieron el cargo de intendente”, aseveró.
Respecto de que esta constante disputa pueda significar que se instale la idea de respaldar el proyecto de ley que elimina la figura del delegado, la politóloga dijo no estar de acuerdo.
“No creo. Es un tema en regiones, pero no para las y los parlamentarios. Cada coalición piensa que ganará la presidencia, así que no quieren ceder su poder, en especial Chile Vamos. En otras palabras, no ganan nada electoralmente con la eliminación de la figura del delegado”, dijo.
Sobre si esta lucha por manejar la agenda a costa de impulsar temas que nos son de sus competencias acrecienta entre los ciudadanos el desconocimiento y la confusión sobre las funciones de estas nuevas autoridades, Jeanne Simon estima que “claramente, es confuso. Hay que reiterar de manera constante la diferencia entre los dos cargos. Pienso que la figura de delegado presidencial desaparecerá con la nueva Constitución, cuando se establezca claramente un Estado descentralizado”, sentenció.
Nueva gobernanza
Para las nuevas autoridades locales, estas primeras tres semanas de “cohabitación” han sido de ajuste.
“Ha sido una realidad tremendamente desafiante, asumimos el mandato otorgado por a ciudadanía democráticamente para darle conducción y liderazgo a la Región de Ñuble, y eso estamos haciendo, y no vamos a dejar de hacerlo en todas las áreas, porque todas son competencia de este Gobierno Regional y de quien lo encabeza”, manifestó el gobernador regional, Óscar Crisóstomo.
Añadió que “entendemos que hoy debemos colocar fuerza en muchas cosas, por ejemplo, tenemos que avanzar con mucho mayor dinamismo en la ejecución presupuestaria, recordemos que esta región es la que tiene la ejecución más baja del país, es paupérrima, lleva solo un 10%. Esta misma realidad la tuvimos el año pasado, e implicó que el territorio perdiera entre $6 mil y $7 mil millones por esta baja ejecución presupuestaria. Solo en la Zona de Rezago se perdieron $1.300 millones por no haber ejecutado las obras comprometidas. Por ello, nuestro principal desafío hoy es una reprogramación que estamos viendo en conjunto con los alcaldes, los consejeros regionales y nuestros equipos directivos, porque tenemos que cumplir. Tenemos altas expectativas para el próximo año, y tenemos que cumplir con nuestro programa de gobierno”, sostuvo Crisóstomo, quien insistió en que ése es el principal mandato del actual gobierno regional.
En este marco, dijo, “el hecho de haber sido elegidos democráticamente nos permite tener una condición distinta, porque tenemos la validación de la ciudadanía y nos somos designados, lo que marca una gran diferencia en cuanto a liderazgo. Estoy muy agradecido de quienes se han sumado en estas semanas a nuestro trabajo, ha habido una diferencia en la gestión y en cómo hemos ido articulando”, aseveró, tomando como ejemplo el Centro Teletón.
“Hay que recordar que esto se venía discutiendo hace mucho tiempo, pero nos pusimos a trabajar y articulamos la voluntad de una municipalidad (Chillán), del Servicio de Salud Ñuble, de la Fundación Teletón y de los consejeros regionales, y el resultado ya es evidente. A menos de tres semanas de haber asumido, estamos ad portas de firmar este convenio con recursos del Gobierno Regional para poder construir este centro y un programa de inclusión, que fue algo que adicionamos, porque entendimos que era importante para la región”, afirmó.
El gobernador también sacó a colación el centro oncológico.
“Siempre se había conversado, el cáncer es la primera causa de muerte en nuestra región, y pudo haberse incluido en el nuevo hospital y no se hizo. Lo pusimos en la agenda durante nuestra campaña y nos pusimos a trabajar. El resultado es que ya el Servicio de Salud Ñuble irá adelantando la inversión, lo que es bienvenido. Agradecemos también a la municipalidad, que puso a disposición un terreno, sobre la base de conversaciones que sostuvimos. Lo que quiero decir es que el rol que está cumpliendo este nuevo Gobierno Regional y este gobernador es de articular y liderar procesos en todas sus áreas, y poco a poco se ha ido entendiendo, lo que agradezco. Somos una autoridad elegida democráticamente, y sé que a algunos les cuesta y les va a costar entenderlo, pero aquí ha cambiado la gobernanza y la democracia en todas las regiones. En mi caso, defenderé con voz alta cuáles son los desafíos de las regiones. Se lo dije al Presidente de la República, él hoy tiene la oportunidad única de darle más potestades a los gobernadores, las regiones necesitan que el gobierno central tenga mayor voluntad para avanzar y no atrincherarse, eso no le sirve a la ciudadanía, al país y menos a una región como la nuestra, con tan bajos indicadores. Seguiremos en esta misma dinámica, con mucha fuerza, alzando la voz cuando sea necesario, y articulando voluntades. Tenemos un gran equipo; alcaldes alineados en este mismo sentido y una sociedad civil que se ha mostrado dispuesta a poder colaborar y a impulsar los proyectos que la comunidad requiere”, manifestó Crisóstomo.
“Seguir haciendo la pega”
En el caso del delegado Presidencial regional, Cristóbal Jardua, su accionar desde que dejó de ser intendente no ha variado mucho, pues temas de alta exposición pública, como la seguridad ciudadana y el manejo de la pandemia, siguen estando a su cargo.
“En el caso de nosotros, el trabajo prácticamente continúa siendo el mismo, salvo las competencias que nos sacaron respecto de los fondos del FNDR, pero el resto de nuestra agenda y lo que es nuestro plan regional, que involucra prácticamente todos los proyectos que están en ejecución de acuerdo al financiamiento de los servicios y también parte de algunos proyectos que quedaron con recursos entregados del FNDR; sigue intacto y ejecutándose de buena manera”, planteó el delegado Presidencial.
Además de todo eso, dijo, “tenemos un trabajo fuerte que estamos realizando en materia epidemiológica, que ha sido muy exitoso en lo que llevamos de gobierno, y especialmente en estos últimos meses, con indicadores muy positivos para nuestra región. Ha sido un trabajo extenso, en el cual en ningún caso es prioridad estar disputando competencias con el gobernador regional. Nosotros nos mantenemos trabajando sobre la base de lo que nos mandata la ley y el Presidente Sebastián Piñera, y lo único que nos interesa es hacer nuestro trabajo y llegar con gestión, apoyo y ayudas concretas a los vecinos de las veintiún comunas. Nuestro principal objetivo es seguir haciendo la pega, y hacer de Ñuble una mejor región”, sentenció el delegado.