Cuando arrancó el Torneo de la Primera A del Fútbol Chileno, el medio elogiaba el poder de fuego de Ñublense, que si bien sigue siendo el equipo más goleador, en las últimas fechas, ha sufrido para llegar al gol.
Esta preocupante tendencia se confirmó frente a Deportes Antofagasta, ya que los diablos rojos no pudieron con los Pumas en casa y sellaron un frustrante empate sin goles.
Si bien el equipo de Jaime García, sigue apostando por la intensidad, la dinámica circulación, las transiciones rápidas y la recuperación veloz post pérdida, en los últimos 20 metros, carece de claridad y definición.
Ante Los Pumas, pudo ganar el partido, pero la falta de fineza de sus intérpretes en ataque y la desesperación de los que gestan desde el fondo por querer ganar, termina por conspirar contra el objetivo.
Nicolás Guerra pudo anotar a los 11’ y luego a los 18’, pero la ocasión más clara la tuvo Jason Flores, cuando su disparo impactó el vertical derecho defendido por Nicola Pérez, quien en la recta final del primer tiempo, también sacó una opción de Bello.
El buen arranque de Ñublense se fue diluyendo con el pasar de los minutos, especialmente, tras la lesión de Matías Moya, que dio paso a Christián Bustamante, que no tuvo una buena tarde.
Volvió el “Pájaro”
Jaime García, apostó por ingresar con cuatro atacantes el segundo tiempo, mandando a la cancha a Maximiliano Quinteros, quien se sumó a Bustamante, para abrir a Pinto y Guerra. Pero cantidad no es calidad y el masivo ataque no se tradujo en más ocasiones, porque el mediocampo, comenzó a sufrir para discutirle la tenencia a Antofagasta.
El partido entró en un carrusel de ataques, pérdidas y disputas en la zona media.
Ñublense mejoró con el ingreso de Roberto “El Pájaro” Gutiérrez, quien contra todo pronóstico, saltó a la cancha y en tres jugadas aportó toda su experiencia cómo referente ofensivo, pero sus jugadas no fueron aprovechadas.
Antofagasta, que apostó por salir rápido, marcó por intermedio de Tobías Figueroa, pero su conquista fue anulada por fuera de juego.
El Rojo se fue con todo arriba en los últimos minutos, pero la historia se repitió. Mucho pelotazo, centro o pase impreciso y falta de definición. La que quedó de manifiesto cuando en la recta final, Bustamante se farreó una habilitación que pudo definir con un remate al arco o centro rasante para el gol del triunfo, pero levantó la pelota de manera increíble con un centro defectuoso.
Así se ahogó el triunfo de Ñublense, que dejó escapar la victoria en casa, donde no gana desde el 7 de junio cuando venció a Audax Italiano, previo al receso.
Con este resultado, suma 18 puntos y se mantiene en el quinto lugar, pero el jueves visita a la Universidad de Chile a las 19:30 horas en el estadio El Teniente de Rancagua.