El pasado 31 de agosto se cumplió un año del crimen que conmocionó a los chillanejos, luego que una pelea protagonizada por dos indigentes de la Plaza Sargento Aldea terminara con la muerte de uno de ellos.
Los hechos ocurrieron ese día a las 13:30 horas, cuando Freddy Pavón Iturra y Luis Soto Hernández, de 51 años, disputaban un colchón, y razón por la cual Freddy recibió reiterados golpes en la cabeza con un palo, cuyas lesiones le provocaron un trauma encéfalo craneano complicado y su deceso.
El fiscal Mauricio Mieres detalló que los hombres en situación de calle discutieron y “la víctima espantó al acusado con un palo, luego este último se retiró, pero a los poco minutos tomó el mismo palo y le pegó en la cabeza. Con el primer golpe cayó al suelo y después continuó golpeándolo en la cabeza. La víctima falleció en el lugar”.
Por este caso, que se dio en contexto de abandono y miseria, la Fiscalía logró una condena contra el indigente homicida, Luis Soto Hernández. Se trata de una pena de 10 años y un día de cárcel.
La defensa del acusado alegó una imputabilidad disminuida, lo que fue desestimado por el Tribunal Oral en lo Penal de Chillán, el que expresó que “como se advierte de los peritajes presentados por la Defensa, éstos no parecen ser fiables”.
