Tras diversas gestiones realizadas por el equipo de la Oficina de Integración Comunitaria de la 4a. Comisaría Yungay, Carabineros permitió que un joven del sector se reencontrara con su madre tras perder el contacto hace 29 años.
Ángel Molina, de 30 años, era apenas un niño cuando dejó de ver a su madre María Elsa, por eso, acudió a la unidad policial para solicitar ayuda y reencontrarse con su progenitora.
De forma inmediata, Carabineros comenzó la investigación y consultas respectivas, con lo que pudo establecer que María Elsa mantenía domicilio en Chillán.
Tras la comunicación entre las unidades de la capital regional y la de Yungay, madre e hijo pudieron reencontrarse y compartir la emoción de un abrazo.
En el encuentro, Ángel conoció a sus hermanos, y María Elsa a su nuera.
La familia se manifestó agradecida de la labor de los funcionarios, más allá de se trabajo policial.