El ministro italiano de Educación, Lorenzo Fioramonti, miembro del movimiento “5 Estrellas” (antisistema), anunció el jueves su dimisión por no haber obtenido del gobierno los fondos necesarios para mejorar la situación de las escuelas y universidades.
“El 23 de diciembre por la tarde envié mi carta oficial de dimisión como ministro de Educación (…) Acepté mi misión con el único objetivo de cambiar la tendencia que durante décadas pone a la escuela, la formación superior y la investigación italianas en condiciones muy complicadas y de mucho sufrimiento”, dijo el ministro en un mensaje difundido en la red social Facebook.
Según el responsable, “hubiera hecho falta más valor de parte del gobierno” para dar los fondos necesarios, sobre todo a la “universidad y a los investigadores”.
Su salida del gobierno es un golpe duro para la coalición gubernamental, formada por el centro-izquierda y el “Movimiento 5 Estrellas” (M5S) que después de cuatro meses en el poder, muestra ya fisuras internas importantes en varios temas, por ejemplo la migración.
También deja de manifiesto los problemas en el seno del M5S, cuyo líder, Luigi Di Maio, ministro de Relaciones Exteriores, no es visto con agrado por todos, lo cual ha hecho que algunos miembros del partido se unan a la extrema derecha de Matteo Salvini, expeso pesado del gobierno.
Fioramonti, por su parte, tendría intenciones de crear un grupo independiente, embrión de un futuro partido, y seguiría apoyando al primer ministro.