Por décadas el patio 5 de Abril, ese triángulo de cemento desolado y con escasa visibilidad desde el exterior que existe en el costado poniente del Mercado Municipal, se ha prestado como lugar de pernoctación de personas en situación de calle, baños de emergencia e incivilidades varias.
Sólo un puñado de personas a cargo de un par de locales de ventas de yerbas le habían estado dando algo de vida y sentido a ese lugar.
Es por eso, que siempre se pensó como un espacio ideal para agrupar de manera ordenada a algunos comerciantes ambulantes y así evitar que se instalen en otros lados sin permiso. Sin embargo, por la falta de flujo de personas, la idea nunca prosperó.
No sería sino un proyecto paralelo, en el mismo Mercado Municipal, el que podría significarle un impulso definitivo y promisorio a esa “perseguida” actividad comercial: el proyecto de remodelación del sector de Isabel Riquelme.
Tal remodelación está ad portas de licitarse luego de que el proyecto original se suspendiera producto de la reutilización de los recursos destinados, para ir en apoyo de las necesidades sanitarias generadas por la pandemia del coronavirus, y esto requiere que el municipio traslade a todos los feriantes de Isabel Riquelme al patio 5 de Abril mientras se completa esa obra.
Es por esto, que ayer, el alcalde Camilo Benavente, hizo el acto simbólico de la postura de la primera piedra en lo que fue el inicio de la construcción del techo y el cambio de suelo al “triángulo”, con miras a que se entregue en la segunda quincena del mes de noviembre para iniciar el traslado de los locatarios.
“Y una vez que ellos (los locatario) se vuelvan a Isabel Riquelme ya remodelado, esperamos que todos sus clientes ya tengan incorporado que acá también hay un comercio activo y sigan viniendo, porque es acá donde, entonces, instalaremos a unos 80 ó 90 comerciantes ambulantes para que puedan trabajar de manera digna, en un espacio digno, y sin tener que andar arrancando de los carabineros”, dijo el jefe comunal.
La obra estará a cargo de la constructora Fernando Antonio Díaz de Arcaya y contemplan recursos por $568.073.116 para la intervención de un área de 1.762 metros cuadrados
Años de espera
La remodelación del patio Isabel Riquelme, que también contará con techumbre y celosía -como el pabellón de Arturo Prat- contempla la reconstrucción de cocinerías y pescaderías, además de la creación de aguas lluvias, lo que en suma requiere de un monto cercano a los $2.900.000.000 con financiamiento del Gobierno Regional.
Sin embargo, para que los locatarios puedan disfrutar de esa “nueva casa” deberán pasar a lo menos entre 12 y 14 meses trabajando de manera provisoria en el patio 5 de Abril.
María Angélica Vásquez, una de las locatarias, advierte que “en un principio es posible que nuestros clientes se van a perder un poco con esto del cambio, pero lo importante es que se está cumpliendo esto que por décadas hemos anhelado, como es el patio techado”.
Entre las razones que justifican ese anhelo, destacan que “para los temporales a muchos se nos vuelan los toldos, o con las heladas y el frío muchos de nosotros nos terminamos enfermando, pero tenemos que salir a trabajar igual todos los días”.
Su colega, Silverio Padilla, agrega que “cuando hicieron el techo de Arturo Prat, nosotros estábamos ilusionados porque pensamos que luego venía el nuestro, pero por el tema de la pandemia, todo se suspendió. Ahora que ya lo estamos viendo, nos sentimos felices. Yo llevo más de 20 años trabajando y este es el cambio más significativo que hemos tenido en todo este tiempo”.
Fernando Cifuentes, secretario de la asociación gremial Plaza Sargento Aldea, estima que “para que este patio 5 de Abril se llene de gente y esos mismos clientes sigan viniendo, hay que ayudar a difundir este cambio, pero también se debe mejorar la fachada por fuera, por 5 de Abril, hacer que desde afuera la gente sepa que acá dentro van a pasar cosas nuevas, porque este paño sigue estando cerrado y eso mismo hace que el lugar se preste para cosas que no corresponden”.
En la ceremonia estuvieron presentes los concejales Brígida Hormazábal, Rodrigo Ramírez, Marina Crisóstomo y Yanina Contreras, quienes explicaron a nuestro medio que el municipio contempla diversas estrategias de difusión de estos cambios, para que las personas sepan con antelación que, por estos cerca de dos años, en el patio 5 de Abril se seguirán vendiendo frutas, verdudas y mariscos.